Milei prometió dar fin "a la casta política parasitaria, chorra e inútil de este país"

El a partir de ahora candidato oficial a presidente por La Libertad Avanza, el diputado Javier Milei, no solo pateó el tablero político de la Argentina, sino que prácticamente dejó sin palabras a sus rivales directos y a los referentes de las principales coaliciones políticas del país, el oficialista Unión por la Patria y el opositor Juntos por el Cambio.

Ocurre que si bien las encuestas venían mostrando desde hace tiempo un constante crecimiento en la intención de voto hacia el libertario, el flojo desempeño de sus referentes locales en las elecciones provinciales que se habían dado antes de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) de ayer hacía pensar en la posibilidad de que aquellos sondeos no hayan estado reflerjando una realidad, sino más bien una “sensación”, consecuencia de la repercusión en los medios de cada acción del diputado.

En los comicios provinciales del 11 de junio en Tucumán, por ejemplo, el candidato mileiista a gobernador, el legislador Ricardo Bussi (Fuerza Republicana -FR-) había cosechado solo 44.050 adhesiones, un insignificante 3,95% de los votos. Ayer, sin embargo, el mismo Bussi -ahora en su rol de precandidato a diputado- anunciaba exultante que si los guarismos de las PASO se repiten en las elecciones generales del 22 de octubre, FR obtendrá dos de las cinco bancas en juego en la Cámara baja del Congreso nacional.

Pero allende la cuestión comarcana, el caso es que Milei resultó ayer el precandidato a presidente más votado. Con el 92% de las mesas escrutadas, el líder libertario cosechaba 6.785.784 votos, un 30,31%. Le seguía el precandidato por Unión por la Patria, el ministro de Economía de la Nación, Sergio Massa, con 4.769.941 sufragios, que junto a los 1.290.877 de Juan Grabois le daban al frente gobernante un 27,07%. En cuanto a fuerzas, sin embargo, detrás de La Libertad Avanza se ubicó Juntos por el Cambio. Sumados los votos de la ex ministra de Seguridad de la gestión anterior, Patricia Bullrich, y del jefe de Gobierno de la CABA, Horacio Rodríguez Larreta, esta coalición obtenía 6.324.687 adhesiones, un 28,25%.

La performance electoral de Milei hará que este pase a ser durante los próximos 69 días -desde hoy hasta la votación “por los puntos”- la principal figura política del país. Y no solo será observado con lupa por los dirigentes locales, sino también por los directivos del Fondo Monetario Internacional (FMI), y los presidentes de los países que alguna relación mantienen con la Argentina.

Milei ganó en cuatro de los seis principales distritos electorales del país: en Córdoba -bastión de otro precandidato a presidente, el gobernador, Juan Schiaretti-, en Santa Fe, en Mendoza y en Tucumán. Solo perdió en provincia de Buenos Aires y en Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA). En esta última arrasó Juntos por el Cambio, y sacó más de 30 puntos al libertario; en la provincia, Unión por la Patria lo superó por menos de ocho puntos.

Cabe subrayar que Milei alcanza esos guarismos en su primera postulación para la Presidencia -en 2021 había sido candidato a diputado-. Analistas coinciden en que logró aglutinar el descontento generalizado, no solo contra el Gobierno de Alberto Fernández y de Cristina Fernández -el de la inflación y del dólar “blue” imparables, entre otros desastrosos indicadores económicos- sino también contra los candidatos de Juntos por el Cambio, signados por el recuerdo fresco de un Gobierno macrista para el olvido.

Si los números de las PASO más o menos se repiten en las generales, Milei disputaría el balotaje el 19 de noviembre contra Bullrich, que venció cómodamente a Rodríguez Larreta en la interna de Juntos por el Cambio.

Gracias y arengas

“Quiero darles las gracias a todos los que vienen apostando desde 2021 -y a los que se fueron sumando-, para crear un proyecto liberal con proyección nacional que llegue a ser Gobierno. Hemos logrado construir esta alternativa competitiva que dará fin a la casta política parasitaria, chorra e inútil de este país”, dijo un exultante Milei al abrir su discurso, en el búnker libertario.

Durante la jornada, había realizado denuncias públicas de robos de boleta en diversos distritos del país; particularmente en localidades bonaerenses. “Quiero darle las gracias a todos los fiscales que han defendido con uñas y dientes cada uno de los votos de una Argentina liberal, pese a las continuas mañas de la vieja política”, remarcó.

Destacó, también, a sus colaboradores. “Gracias a ellos, porque mientras se nos acusaba de que no teníamos un equipo, fuimos el único espacio que presentó un programa de Gobierno. ¡Vaya equipo que hemos armado para poner de pie a la Argentina!”, celebró.

En varias ocasiones durante el uso de la palabra apeló a una de los caballitos de batalla que utilizó durante toda la campaña. “Quiero contarles que estamos frente al fin del modelo de la casta; basado en esa atrocidad que dice que donde hay una necesidad nace un derecho, pero que se olvida que alguien tiene que pagar (ese derecho); cuya máxima expresión es la aberración de la justicia social, precedida por el robo, con un modelo que se traduce en un fuerte déficit fiscal. Hoy la Argentina es absolutamente inviable; con más de 170 impuestos, no favorece al que quiere poner un negocio honesto, sino a ladrones, a prebendarios y a amigos del poder”, puntualizó.

En su discurso dejó en claro que metía a todos los dirigentes políticos en la misma bolsa, oficialistas y opositores. “Somos la fuerza más votada porque somos la verdadera oposición. Una Argentina distinta es imposible con los mismos de siempre; desde hace 40 años están todos en el Estado: los de buenos y los de malos modales. Somos el vehículo idóneo, no solo para terminar de sepultar al kirchnerismo, sino para sacar a la Argentina adelante”, manifestó.

Tres cánticos en particular devolvía la multitud reunida en el búnker libertario: “tiene miedo, la casta tiene miedo...”, “ohhh, que se vayan todos, que no quede ni uno sólo” y “se siente, se siente, Milei presidente”.

Y sobre el cierre, lanzó algunas cifras. “De los 24 distritos electorales del país, 17 se pintaron de violeta, con La Libertad avanza. Es más, con estos números, en octubre estamos en condiciones de sentar ocho senadores y más de 35 diputados. ¡Hemos armado una fuerza!”, advirtió.