Por Nahuel Toledo
04 Octubre 2023
El debate parlamentario en torno a las reformas de la Ley de Alquileres volvió a ubicar al kirchnerismo y al interbloque de Juntos por el Cambio (JxC) en posiciones diametralmente opuestas en las que las posibilidades de que encuentren un punto de acuerdo parece imposible.
La reunión que llevaron a cabo los integrantes de las comisiones de Presupuesto y Hacienda y Legislación General le permitió a la bancada oficialista alzarse con el dictamen de mayoría para respaldar el proyecto modificado que llegó desde el Senado. Sin embargo, la oposición intentará juntar los votos necesarios para insistir con el proyecto original que logró aprobar en agosto. El futuro de este proyecto, que podría discutirse la semana próxima, está totalmente abierto porque cualquiera de los dos espacios necesitará el respaldo de sectores aliados para lograr su sanción definitiva.
Posturas inamovibles
El Frente de Todos (FdT) consiguió el despacho de mayoría con 41 firmas para poder avanzar con la iniciativa que mantiene el plazo (vigente actualmente) de tres años en los contratos; establece que los aumentos sean semestrales; y fija un nuevo índice para la actualización, a partir del coeficiente “Casa Propia”, utilizado por el Ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat.
En tanto, con 39 firmas, JxC se alzó con el despacho de minoría, con el apoyo también de la legisladora bonaerense Graciela Camaño. La propuesta opositora devuelve el plazo de los contratos a dos años, permite ajustes cada cuatro meses y deja librado al acuerdo de la partes la actualización de los alquileres con la opción de tres índices (IPC, IPM, IS).
“El proyecto planteado por el oficialismo no ayuda al sector porque el coeficiente que pretende implementar está por debajo del resto de los coeficientes planteados por nosotros. Y eso, entendemos, va en contra de la oferta”, manifestó a LA GACETA el diputado Roberto Sánchez. “Insistimos con la media sanción porque entendemos que con las condiciones inflacionarias en las que vivimos es más saludable está ley para tener mayor oferta. Con la ley actual se retiraron del mercado muchas propiedades y el Gobierno tampoco llevó adelante un plan de viviendas lo que se conjuga con la ausencia de créditos hipotecarios”, remarcó.
Más allá de mostrarse confiado en que la bancada opositora pueda sumar el apoyo de otros partidos provinciales para ratificar la aprobación del proyecto, Sánchez advirtió sobre la posibilidad de que algunos diputados que el pasado 23 de agosto votaron de una manera ahora lo hagan de otra.
En esta misma línea, la diputada Paula Omodeo remarcó que la insistencia con el proyecto de la coalición opositora se fundamenta en la posibilidad de llevar “algo de alivio” a inquilinos y propietarios. Y enfatizó que la suerte de la iniciativa dependerá del comportamiento que tengan algunos espacios en el recinto. “Depende mucho de la postura de los del medio, que en su momento acompañaron a la postura de JxC. “Creemos que, por un tema de coherencia, la mayoría de estos bloques del medio deberían mantener su postura, pero, bueno, hemos visto que en el Senado hubo algunos cambios. Nosotros vamos a insistir”. Finalmente, apuntó contra el kirchnerismo por “hacerse el defensor de los inquilinos”, cuando en realidad impulsan “medidas intervencionistas y populistas que terminan perjudicando a quienes dicen defender”.
Chicanas encendidas
Juan Manuel López, representantes de la Coalición Cívica ARI y miembro del interbloque de JxC, aseguró que la actual legislación no funciona ante en un proceso inflacionario creciente y responsabilizó al ministro de Economía, Sergio Massa, de “romper el mercado inmobiliario”. “Fue el ministro candidato Massa con una súper inflación, que supera los dos dígitos por mes. Y en este contexto los propietarios retiran las propiedades, los contratos quedan al margen de la ley y le agregamos incertidumbre”, dijo. Además de asegurar en su alocución que aprobar el proyecto enviado por el Senado representaría una “catástrofe” para el sector, López destacó que la propuesta opositora no prosperó en la Cámara alta por el apoyo del senador rionegrino Alberto Weretilneck a la propuesta oficialista. “Weretilneck cambió su posición en relación a sus diputados y yo espero que esta vez sus diputados mantengan su postura. Y ya tuvimos un antecedente del bloque del diputado Javier Milei votando con el oficialismo. Si los bloques de Milei y Weretilneck nos apoyan vamos a tener una mejor ley, más adecuada al contexto inflacionario y si no nos acompañan vamos a tener una ley que diseñó Cristina Fernández de Kirchner y afecta cada vez más a los inquilinos”.
Las declaraciones de López encendieron la polémica porque el presidente del bloque del FdT, Germán Martínez, no dudó en calificar de “vergüenza” el hecho de que un diputado pida la palabra “para apretar a sus colegas públicamente”. Y Eduardo Tonioll, también del oficialismo, fue más allá al afirmar que “Argentina tiene un problema y es que la estructura de la oferta de la vivienda es desproporcionadamente más alta que el resto de los precios de la economía”. Y lanzó: “Otro problema es la oposición pedorra a este gobierno”.
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