31 Octubre 2023
MANIOBRAS. Ya dentro de la Franja de Gaza, la maquinaria de guerra israelí se desplaza hacia los centros poblados, en el norte de ese territorio palestino, mientras se intensifican los bombardeos sobre más de 600 objetivos. dfdfdfdfdf
FRANJA DE GAZA.- La guerra entre el Ejército de Israel y el grupo Hamas, que controla la Franja de Gaza, se intensifica. La ofensiva aérea contra el enclave palestino, que inició hace más de tres semanas en respuesta al sorpresivo y sangriento asalto del movimiento islamista, avanza ahora con una paralela incursión terrestre de las tropas del país de mayoría judía.
Con una infraestructura debilitada y tras informar sobre varias muertes de líderes de Hamas, las tropas israelíes aseguraron ayer que llegaron hasta las inmediaciones de la ciudad de Gaza. Hamas asegura que repelió tanques militares en la zona.
Esta “nueva etapa de la guerra”, así denominada por el gobierno de Benjamin Netanyahu apunta a la eliminación total del movimiento que controla la Franja de Gaza. Con ese objetivo, tropas y tanques israelíes atacaron ayer la principal ciudad del norte de Gaza desde ambos flancos, tres días después de que iniciaron la gran ofensiva terrestre en el enclave palestino. Los llamamientos internacionales para que se proteja a la población civil no fueron escuchados.
El Ejército israelí dijo haber atacado más de 600 objetivos de militantes en los últimos días, mientras ampliaba las operaciones terrestres en la Franja de Gaza, donde la población civil palestina necesita combustible, alimentos y agua potable.
Los militantes islamistas dijeron que habían repelido un intento de entrada de tanques israelíes en la ciudad de Gaza desde el este y que estaban luchando contra ellos en la frontera con Israel. “Nuestro deber es luchar y luchar”, dijo en un comunicado el grupo Yihad Islámica, aliado de Hamas. Añadió que ahora no era el momento de un alto el fuego.
El Ejército israelí asegura haber matado a destacados operativos de Hamas. “Las tropas de las Fuerzas de Defensa de Israel mataron a decenas de terroristas que se atrincheraron en edificios y túneles e intentaron atacar a las tropas”, dice el comunicado.
El viernes, Israel renovó las advertencias a la población civil para que se desplace del norte del pequeño enclave densamente poblado hacia el sur, al tiempo que iniciaba un avance para perseguir a los militantes de Hamas que, afirma, se ocultan en un laberinto de túneles bajo la ciudad.
Muchos palestinos se quedaron por miedo a encontrarse sin hogar, como le pasó a sus antepasados y alarmados por los ataques aéreos israelíes más al sur.
Fadi, que vive en el campo de refugiados de Jabalia, en la periferia del norte de la ciudad de Gaza, y no quiso dar su apellido, dijo que la zona estaba ahora en peligro mortal por la ofensiva terrestre israelí, con tanques retumbando en sus márgenes. Pero prometió no huir.
“Todo el lugar está lleno de gente. Nadie en todo el barrio se ha ido. Nos quedamos”, afirmó. “Ya sean tanques o aviones, no habrá otro desplazamiento (de palestinos). Esa es nuestra decisión aunque eso signifique nuestro martirio (muerte)”.
Ayer, residentes dijeron que las fuerzas israelíes llevaron a cabo docenas de ataques aéreos en el lado oriental de la ciudad de Gaza, y se escuchaba del ruido de tanques en medio de intercambios de disparos. Una publicación en redes sociales parecía mostrar un tanque en la ruta principal de Salahudeen, que conecta la ciudad con el sur del enclave.
Más tarde, los residentes y la oficina de prensa del gobierno de Hamas afirmaron que los tanques habían retrocedido hacia la valla fronteriza fortificada que rodea Gaza. El brazo armado de Hamas informó que el intenso fuego de mortero les había hecho retroceder y sus compañeros de la Yihad Islámica aseguraron que sus combatientes luchaban allí contra las fuerzas israelíes.
Las autoridades sanitarias palestinas dijeron que los ataques aéreos habían golpeado cerca de tres grandes hospitales en la ciudad de Gaza. La Oficina de Ayuda Humanitaria de la ONU (OCHA) declaró que 117.000 civiles se refugiaban junto a pacientes y médicos en hospitales del norte.
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Israel ha acusado a Hamás de situar centros de mando y armamento cerca de los hospitales, algo que el grupo niega.
En el sur, las explosiones de los ataques aéreos sacudieron la ciudad de Rafah, cerca del único paso fronterizo operativo de Gaza, con Egipto, y al este de Jan Yunis.
Israel ha afirmado que 1.400 personas murieron y 229 fueron tomadas como rehenes cuando militantes dirigidos por Hamás irrumpieron en la frontera y arrasaron ciudades y kibutz israelíes cercanos el 7 de octubre, el ataque individual más mortífero en los 75 años de historia de Israel. (Reuters)
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