Elecciones 2023: ¿qué hará Jaldo rumbo al balotaje?

En la última semana de campaña, el gobernador pedirá a intendentes, delegados comunales y dirigentes del PJ que salgan a buscar el voto para Unión por la Patria.

Osvaldo Jaldo, Sergio Massa y Juan Manzur. Osvaldo Jaldo, Sergio Massa y Juan Manzur. FOTO TOMADA DE TIEMPOAR.COM.AR

Osvaldo Jaldo ha terminado una semana intensa. No sólo porque el gobernador tuvo que seguir acomodando una gestión con nueva estructura que obligó a reformular el proyecto de Presupuesto para 2024. También porque terminó con la ronda de asunciones, con las que aprovechó para recordar en cada municipio que lo que más le conviene para su gestión tucumana es que Sergio Massa se convierta en presidente en el balotaje del domingo 19. El libertario Javier Milei no le asegura nada a las provincias. Catorce de ellas tienen el signo peronista; el resto responden a Juntos por el Cambio. Una reformulación de la relación Nación-provincias está a la vuelta de la esquina si el líder de La Libertad Avanza se impone en el 19-N.

A Jaldo no le queda otra que ponerse a la cabeza de la campaña en el último tramo. Habla permanentemente con el ministro de Economía de la Nación y postulante de Unión por la Patria. Como dice el analista político cordobés, Cristian Buttié, Tucumán es el último bastión en caudal electoral de importancia que le queda al peronismo en el Norte Grande. Y eso expone para bien o para mal a Jaldo.

Los allegados al mandatario provincial señalan que el número mágico es 470.000 votos. Lograrlo no será una meta sencilla. Ese fue el caudal de sufragios que obtuvo en las presidenciales del 22 de octubre.

“No nos queda otro camino: hay que ganar o ganar. La próxima batalla electoral se a todo o nada”, exclamó Jaldo en cada encuentro con los intendentes que asumieron en el interior. Con ellos volverá a encontrarse este lunes, en lugar a confirmar. Una de las alternativas es concentrarse en un almuerzo de camaradería en El Cadillal, donde el ministro del Interior, Darío Monteros, suele convocar a la dirigencia.

La otra posibilidad es que se reúnan en una casona de la calle Entre Ríos de esta ciudad, donde habitualmente el oficialismo realiza los spot de campaña y los afiches. Un cambio de signo político en la Casa Rosada modificará el trato fiscal de la Nación hacia la provincia.

Si eso sucede, dicen los allegados al mandatario, indudablemente que el efecto también se sentirá en la distribución de fondos a los municipios. El Pacto Social continuará hasta el 31 de diciembre. Nadie se anima a decir qué sucederá después y si habrá refinanciación de la deuda para darle cierta autonomía financiera a las intendencias.

El gobernador  también planteó esta cruzada peronista ante los 93 comisionados rurales el pasado viernes, en un encuentro en el que se coordinaron las tareas de mejoras de los caminos vecinales y otras obras en esas jurisdicciones del interior. En ellos confía que lleven el mensaje a cada habitante de que “es mejor mantener en la Nación el mismo signo político que en Tucumán”, según comunicó.

El martes, Jaldo también hará una cumbre con aquellos dirigentes que no pudieron alcanzar el objetivo de llegar a un cargo electivo. Según trascendió, por la mañana de ese día será el turno de los referentes de la sección Este; por la tarde, convocarán a los de la Oeste.

El titular del Poder Ejecutivo también planea recorrida en los barrios capitalinos, en compañía de la intendente de San Miguel de Tucumán, Rossana Chahla.

En la Casa de Gobierno llama la atención la ausencia en la campaña provincial del  presidente del distrito Tucumán del Partido Justicialista, Juan Manzur. Si bien el ex gobernador había dicho que se concentraría en hacer convocatorias en varios distritos del Norte Grande, un sector de la dirigencia peronista local apunta que hasta ahora no se mostró en acto alguno. Desde que entregó el cargo a Jaldo, el domingo 29 de octubre, Manzur no registra posteos en sus redes sociales.

Las encuestas nacionales que han trascendido inquieta al oficialismo tucumano. Un empate técnico electoral mantendrá la incertidumbre hasta el mismo día del comicio, sobre todo con el nivel de cansancio que la sociedad ha demostrado en un año cargado de elecciones y con una economía que no contribuye a modificar el humor social.

El Gobierno nacional apuesta a medidas que tiendan a alentar el consumo y a mitigar los efectos de una inflación que, aunque no será de dos dígitos, para octubre se proyecta entre un 9,2% y un 9,8% de variación respecto de septiembre. La provincia no desentona en ese sentido. La gestión de Jaldo ha decidido reabrir las negociaciones paritarias, con el fin de mostrar voluntad de contribuir a la recuperación del poder adquisitivo del salario estatal en lo que resta del año. En el medio, como una muestra de buena voluntad, otorgará en la semana que viene un anticipo de $ 40.000 por agente a cuenta de las paritarias, mientras los gremios se acercarán a la Casa de Gobierno a exponer sus peticiones.

Massa, en definitiva, apuesta a que las provincias contribuyan con más votos para alcanzar su objetivo presidencial. Milei, en tanto, expondrá su discurso anticasta con la idea de desbancar a Unión por la Patria del poder. La moneda está en el aire.

Comentarios