Muchos legisladores prestaron juramento en el cargo que fueron electos e inmediatamente sacarán licencia para ocupar otro en el ejecutivo. Me pregunto ¿Por qué no respetan el voto? Mi opinión es que todo cargo electivo para la “administración” política no corresponde ningún tipo de privilegios administrativos como licencias; o son legisladores, en este caso, o dejan el cargo que fue electo, porque la sociedad los delegó con su voto para que cumplan solamente esa función- ¿O acaso en la boleta dice legislador o ministro, para que los avale sacar licencia? Podrán escudarse en leyes que los autorizan a esa licencia, pero el valor del voto es supremo y debe respetarse; además de esa manera será una forma de ir saneando a los que les gusta estar enquistados en el poder político por años. Tienen la obligación ética; sé que muchos no saben lo que es ética, por el valor universal del voto que les exige el respeto supremo al ciudadano que confió en la persona elegida por el mismo, por lo tanto el político elegido para cualquier cargo, ante una propuesta diferente, debería renunciar para recién asumir el cargo en el Ejecutivo o a donde se lo proponga. Por ejemplo el caso del ex gobernador, agarrando su oflador, se fue a Buenos Aires y sacó licencia volviendo luego “contento” a retomarlo: diferente hubiese sido si tenía que renunciar al cargo electivo, previa evaluación de en qué lugar era más importante. En fin esta opinión es individual y va contra el “viento” del sistema, pero sería interesante que se considere, porque de esta manera se verían caras nuevas ocupando espacios políticos electivos, ya que por ahora son las mismas que se repiten en estos 40 años de democracia. Es más, los cargos electivos políticos deberían durar cuatro años y con posibilidad de otros cuatro continuos o alternados y retirarse a formar cuadros nuevos de dirigentes o “descansar” y no permanecer enquistados en el estado “político”; de esta manera, en una de esas viene alguien con la impronta de ser un gran político y darle un impulso distinto al país, provincia o municipio con una mirada diferente a la ideología de los que siempre se sienten imprescindibles.
Manuel Antonio Sepúlveda Manz. G casa 30 Bº Martin Fierro Juan B. Alberdi


















