Tiempo de balances: en Atlético Tucumán no se adaptan a la tecnología

Se termina 2023 y en Atlético es tiempo de balances. En lo deportivo, el equipo de Sergio Gómez y Favio Orsi consiguió mantener la categoría y quedó muy cerca de lograr la clasificación a la Copa Sudamericana; pero en lo institucional, hubo mucha actividad.

Quizás uno de los puntos a más llamativos del año fue la implementación del sistema online para que los hinchas puedan asociarse o comprar las entradas. “Cumplimos con el pedido que nos habían hecho los hinchas, pero lamentablemente no recibió el uso que esperábamos”, alertó Gabriel Alperovich, vicepresidente primero del “decano”. ´

En diálogo con LA GACETA, el dirigente informó que por la plataforma que se inauguró en agosto, solamente se vendieron 230 abonos para plateas y se venden, en promedio, 130 entradas por partido; un número demasiado bajo para lo que se esperaba. “Nos sorprende mucho; pero nos motiva a seguir trabajando para que los hinchas se acostumbren a utilizarla. La idea principal de este sistema es descongestionar la Liga Tucumana; sin embargo, partido a partido, siguen habiendo cuadras de fila para comprar una entrada. De cara a la nueva temporada, vamos a implementar el sistema de débito automático para que los socios puedan pagar la cuota; otra cosa que los hinchas habían solicitado”, aseguró.

En el aspecto deportivo, más allá de lamentarse por no haber clasificado a la Sudamericana, Alperovich intentó valorar que el equipo haya podido mantenido la categoría, e hizo hincapié en el trabajo que se viene realizando en las divisiones formativas. “Estamos conformes. Desde este año, los chicos de Juveniles que participan en los torneos de AFA comenzaron a viajar un día antes de los partidos. Eso es importante porque les da tiempo de descanso. Por ahí los hinchas se impacientan por los resultados, pero no es fácil tener que viajar cada 15 días; eso influye en el rendimiento”, advirtió.

También adelantó que la idea principal es seguir en el camino de la profesionalización de las divisiones juveniles. “Queremos darle las mejores condiciones para que puedan desarrollarse; ese es el punto que verdaderamente importa”, remarcó, antes de dar detalles de las obras en el predio de San Andrés. “Esperamos tener dos o tres canchas en ese complejo para aliviar un poco las del ‘José Salmoiraghi’. Los técnicos de inferiores podrán trabajar con más libertades”.

Alperovich resaltó el trabajo realizado por Martín Anastacio en la Reserva, equipo que finalizó en la novena posición en la última Copa de la Liga. “Por empezar, bajamos el promedio de edad; algo muy bueno y muy difícil de lograr. Quizás otros equipos bajan jugadores del plantel profesional para darle minutos, pero nosotros no queremos eso. No sirve de nada pelear el torneo de Reserva; nosotros buscamos foguear a los chicos. Siempre repito que en inferiores no importan los resultados, si no la proyección. Tenemos muchos valores que esperamos que a futuro nos den alegrías”, dijo. En el listado de futuros profesionales figuran Máximo Pereira, Enrique Maza, Juan Valdez, Nahuel Duarte, entre otros.

Una de las últimas novedades que hubo en torno a las divisiones menores, fue la incorporación de un staff de psicólogos y coach para acompañar a los jugadores. “Buscamos acompañarlos en el camino a la profesionalización. Tenemos un grupo de jugadores en la pensión en los que tenemos depositadas muchas esperanzas. Son el futuro de nuestra institución, por eso debemos estar en esos detalles”, remarcó.

En cuanto a la reestructuración que habrá en las formativas, el dirigente solamente adelantó que Carlos “Pipi” Araujo se hará cargo de la coordinación, lugar que dejó vacante Sergio “Coco” Ramos, que renunció junto al ex dirigente Miguel Abbondándolo. “Desde que trabaja con nosotros lo viene haciendo muy bien. Aporta mucho, está comprometido y hace un trabajo prácticamente de 24 horas”, sentenció y se refirió a la posibilidad de que Diego Barrado asuma como entrenador de la Reserva. “A mí me encantaría. Es una persona que le dio mucho al club y que le tiene mucho cariño; estamos analizando esa posibilidad. Queremos profesionalizar en todos los sentidos a las inferiores; tenemos algunas prioridades, pero lo principal ahora es apuntar todos los cañones al complejo en San Andrés y a mejorar el gimnasio. En 2024 aspiramos a dar un salto de calidad”, finalizó.