Por Gonzalo Cabrera Terrazas
09 Diciembre 2023
ENAMORADOS. El delantero de San Martín de Tucumán Mateo Acosta sonríe junto a su esposa, la futbolista de Boca Camila Gómez Ares. FOTO TOMADA DE INSTAGRAM.
Para que un deportista encuentre el éxito, necesita que su rendimiento sea el adecuado y sobre todo, que su vida esté equilibrada. Así lo entiende Mateo Acosta, quién hace poco unió lazos con su pareja Camila Gómez Ares, futbolista de Boca y de la Selección Argentina. La ceremonia se dio casi de manera fugaz, debido a que no se podía seguir posponiendo y sobre todo teniendo en cuenta que el plantel profesional de San Martín de Tucumán debía retornar a las prácticas para poner en marcha la pretemporada.
“El casamiento fue algo que ya veníamos planificando desde el año pasado. Tuvimos que hacerlo ahora por el tema de que yo iniciaba con los entrenamientos”, le explicó Acosta a LA GACETA. “Se organizó algo muy chico de familia y amigos. El año que viene ya pensaremos en el festejo con más tiempo y más planificación. Estaba organizado para antes de que nos vayamos a Chile, pero pasaron muchas cosas en el medio y me vine para acá”, agregó el delantero sobre el nuevo vínculo con Gómez Ares.
Se conocieron en 2019 tras cruzarse en una concentración, él defendía la camiseta de Guillermo Brown y ella la del “xeneize”. Desde ese flechazo no se separaron más. Eso sí, excepto cuando hay semanas de partido.
“Sabíamos que iba a ser así hasta que termine el torneo de ella en Buenos Aires. Después tienen una competencia en Estados Unidos con la Selección. Después veremos cómo continúa todo”, analizó el atacante sobre cómo será su relación a distancia.
Si bien ahora todo parece alegría, no siempre fue así en la vida de Acosta. Llegó a mitad de año como la carta goleadora desde Huachipato de Chile y lejos de lo esperado, le costó bastante afianzarse en La Ciudadela.
“El tiempo de adaptación fue porque venía de otro fútbol. Corté la pretemporada en Chile y me vine para acá. También me había jugado en contra lo que era la presión del club y la exigencia del torneo. Me sume a un torneo que ya estaba comenzado y en el que faltaba poco para que termine. Todo eso cuesta”, reflexionó Acosta que tuvo que esperar ocho partidos para que se le habrá la red.
En la temporada, el oriundo de Caballito solo marcó dos goles (contra Gimnasia de Mendoza y Patronato), números que no satisfacen al hincha ni mucho menos.
“Siempre vamos por más y no me conformo con lo que se logró. No se pudo cumplir ningún objetivo, tanto en lo personal como en lo grupal. Justo cuando empecé a jugar me lesioné y se cortó ahí, porque también quedamos afuera del Reducido”, advirtió. “Hay que ser autocríticos y saber reconocer que en lo futbolístico nos costó mucho. Pero bueno, ya está, hay que dar vuelta la página, no nos podemos quedar con eso. Tenemos que pensar en lo que viene”, agregó tratando de ponerle punto final a la temporada.
Recién ayer se puso fin a la primera semana de prácticas en el complejo, bajo las órdenes de Ariel Martos y Sergio Saavedra. En ese sentido, Acosta aseguró que espera ponerse a ritmo cuanto antes y tener buenos números en 2024. “A pesar de que no me fui a ningún lado de vacaciones y me quedé con mi esposa e hija Guillermina, este tiempo lejos de las canchas sirvió para descansar y despejar un poco la cabeza. Ahora lo más importante será tener una buena pretemporada, ponerme bien de lo físico y volver a ser el de antes”, anheló Acosta.
CON DEDICATORIA ESPECIAL. Acosta marcó el primero en la goleada contra Gimnasia de Mendoza 4-0 y en el festejo realizó la inicial del nombre de su pareja. LA GACETA/DIEGO ARÁOZ.
Mateo Acosta espera devolver la confianza con goles
Justamente su buen rendimiento en Brown de Adrogué, fueron algunos de los motivos que llevaron a San Martín a posar sus ojos en él. Con solo once partidos disputados, Acosta espera tener más continuidad y al igual que todos en los pasillos de La Ciudadela, mantiene incertidumbre respecto a quién será el nuevo entrenador.
“Cuando llegue el nuevo entrenador, habrá mucho para analizar. Saber qué expectativas tiene, qué sistema y por otro lado, qué jugadores llegarán. Estamos a la espera, pero lo cierto es que debemos ir partido a partido. Si hacemos todo eso, seguramente vamos a andar bien”, concluyó el atacante que espera seguir gritando goles en La Ciudadela y sacarle una sonrisa a los hinchas, esa misma que mantiene él, en una nueva etapa de su vida.
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