Desde que “Mi pobre angelito” se estrenó, el film se convirtió en un clásico navideño. La película del año 1990 protagonizada por Macaulay Culkin se ganó un lugar en los corazones de muchos fanáticos del cine. Sin embargo hoy, a 33 años de su estreno, salió a la luz un detalle que asombró a todos.
La historia de Kevin, el niño que se quedó solo en Navidad porque sus padres se olvidaron de él, fue vista por muchos y en el último tiempo descubrieron la causa exacta de por qué no lo llevaron de viaje a París.
Se trata de la escena determinante que le permitió a todos los fanáticos entender el motivo principal por el cuál Kevin, interpretado por Culkin, no viajó junto a su familia y se quedó en su casa. En ella, el personaje principal se pelea con su hermano Buzz por una porción de pizza.
"Mi pobre Angelito": la escena que esconde el motivo de por qué la familia se olvidó de Kevin
Durante la última cena en la casa, en la que todos comieron pizza, Kevin se enojó porque quería una porción con queso y no había, a lo que Buzz se burló de él e imitó vomitar.
Ante esto, Kevin lo empujó sobre la mesa, por lo que varios vasos con líquidos se cayeron sobre los pasaportes y pasajes que se encontraban ahí.
Luego de esto, el padre de la familia, limpió todo y tiró todos los papeles mojados, en dónde estaban los pasajes y el pasaporte de su hijo, algo que muchos pasaron por alto siempre, ya que la cámara va muy rápido y no deja prestar atención que en el ticket de viaje dice el nombre del protagonista.
Lo cierto es que cuando la familia McCallister llega al aeropuerto y entrega todos los papeles, el tripulante los agarra y sin contarlos les da permiso para que ingresen al avión.
En medio de la vorágine, porque llegaban tarde, nadie se percató de que Kevin no estaba. Recién en pleno vuelo, Kate tomaría conciencia y plasmaría una de las escenas icónicas de la película: el grito desde el asiento por su hijo.