Se cumple un siglo de una coronación especial para San Martín

El fútbol tucumano generó siempre gran expectativa y los torneos de la Federación, iniciados en 1919, siempre fueron muy competitivos y con definiciones dramáticas. San Martín fue el primer campeón federacionista y ya existía la rivalidad con Atlético, equipo se llevó las copas de 1920 y 1921. En 1922 entró a terciar San Pablo que se alzó con el título de la temporada. Llegamos a 1923, año en que el santo repetiría título pero de una manera especial ya que su archirrival estuvo en la punta en la mayoría del certamen. Recién cuando se completó el fixture del torneo con dos encuentro el 16 de diciembre de 1923, los de la Ciudadela alcanzaron la cima y se colocaron un punto arriba de los albicelestes obteniendo el trofeo anual.

Estábamos a mediados de diciembre, en la fecha final debían jugarse dos encuentros: San Martín con Central Norte y Concepción con All Boys. La situación fue que los “ferrocarrileros” y los “gallegos” no se presentaron a jugar. Los puntos fueron a sus contrincantes. Por ende los albirrojos sumaron dos puntos, superaron a Atlético y se llevaron el torneo al sumar 21 puntos contra 20 de los de barrio Norte. En aquel torneo participaron ocho equipos, que fueron: San Martín, Atlético, San Pablo, All Boys, Central Norte, Concepción, Unión Central Norte y Quilmes. Los cronistas expresaron sobre el campeón que “no hay porque negarlo; San Martín una de las instituciones de más arrastre en esta capital, tal vez la que goza de más simpatías populares, se clasifica en primer línea después de una campaña laboriosa de la que se conocen y se recuerdan todos los detalles”.

Tras 12 fechas

Recordemos que aquel torneo tenía como puntero al decano, que tras 12 fechas estaba en la punta: había sumado 16 puntos fruto de siete triunfos y tres empates. Le seguía con 15 puntos All Boys, que compartía la posición con San Pablo. Central Norte y San Martín se ubicaban en la cuarta posición con 13 puntos, pero tenían apenas 10 fechas disputadas. Como se ve la cosa estaba bastante peleada y el torneo, abierto a cualquiera.

Albicelestes y gallegos empataron en aquella fecha, resultado que no cambiaba nada la cima de la tabla. De acuerdo a nuestra crónica “la posición que ocupan en la vanguardia del campeonato estos dos clubes hacía prever un match muy lucido pero en verdad no fue tal”. Se puede decir que la nota destacaba que todos los encuentros de la fecha fueron bastante pobres en juego. En aquella fecha el santo derrotó, en Tafí Viejo, a Unión Central Norte por 1 a 0. Aunque el triunfo se vino para la Ciudadela los locales “tuvieron más oportunidades pero que sus delanteros no pudieron concretar”.

Estamos en noviembre de 1923, había pasado una semana y se cumplió la fecha 13. Atlético derrotó a Unión Central Norte por 3 a 0 demostrando su poderío y mantenía la punta del certamen con 18 puntos. Parecía que nada iba a parar la marcha del equipo de Barrio Norte. Pero en esa fecha ocurre un hecho clave: los santos derrotan a All Boys por 3 a 0, permitiendo que San Pablo alcance la línea de los gallegos con 17 puntos. Los albirrojos suman 15 puntos aunque con dos partidos menos. Por su parte, San Pablo, el campeón de 1922, había derrotado a Central Norte 2 a 0.

El 9 de diciembre se disputó el segundo tiempo del suspendido partido entre San Pablo y San Martín. El anuncio de que se iba a disputar esa fracción de tiempo generó gran expectativa y el escenario iba a ser el estadio decano. El cronista dejó en claro que los espectadores no se vieron defraudados en sus expectativas y por el contrario “hubo momentos en el transcurso del único tiempo jugado, en que ambos conjuntos maniobraron con acierto, sobre todo el team de San Martín que indudablemente jugó más que San Pablo, que no solamente demostró mucha falta de entrenamiento sino que dejó ver un training escaso”.

Ambas vallas pasaron zozobras y se destacó que fue un encuentro sin brusquedades, aunque hubo un choque entre Ibáñez de San Pablo y Dubois de los santos, del cual salió golpeado en su rodilla el primero, aunque se informó más tarde que no era de consideración. En la acción fue expulsado Dubois. Por otro lado el público se mostró poco contemplativo con el árbitro y llegaron a amenazas. Además hubo una fuerte gresca en la tribuna oficial que fue controlada por las autoridades. Pese a todos estos datos, el resultado inicial de 2 a 1 en favor de los capitalinos no se movió. Con este resultado el albirrojo se encaramaba a la segunda posición a un punto del decano que tenía 20 y faltándole un partido por jugar con Central Norte.

Se completa la fecha

Una semana más tarde, con todos los encuentros jugados, se iban a disputar los tiempos restantes de dos encuentros suspendidos. Uno eran los 45 minutos del segundo tiempo entre All Boys y Concepción en la cancha de Comandante Araujo y el otro eran los 37 minutos faltantes de Central Norte y San Martín; el escenario fue la cancha del club Cerveceros. Ambos partidos estaban programados para las 15 aunque como vimos no se jugaron por la no presentación de “ferrocarrileros” y “gallegos” respectivamente.

El anuncio de los encuentros suspendidos consignaba que con ellos finalizaba la actividad de la Federación y “si como se descuenta ya, San Martín mantiene la supremacía en el score con Central Norte, de hecho el campeonato federacionista habrá finalizado”.

De tal manera que el cronista no se anticipaba a los hechos pero aclaramos que ya el resultado era favorable al santo. Ese resultado había quedado en 3 a 0 cuando se suspendió debido a un fuerte aguacero el 2 de diciembre. Además la crónica resaltaba la actitud poco deportiva de los cuervos que tuvieron cierta actitud permisiva en favor de sus rivales. Se comentaba que en las tribunas se criticaba que habían cobrado entrada para un espectáculo así y se produjeron grescas y peleas.

En 1919

En tren de recuerdos nos vamos a remontar a 1919, cuando se disputó el primer torneo de la Federación Tucumana de Fútbol y que coronó campeón al equipo de la Ciudadela, pero que aún no se había mudado a ese barrio. Aquel primer certamen oficial culminó el 28 de setiembre y contó con la presencia de siete equipos: San Martín, Atlético, All Boys, Argentinos del Norte, San Pablo, Rivadavia y Alberdi. Tengamos en cuenta que en aquel tiempo estaba la Liga Tucumana de Fútbol en donde militaban otros equipos. La competencia fue pareja entre los dos grandes y los “gallegos”.

El título de 1923 se recuerda no sólo porque se cumple un siglo de obtenido sino porque para los santo derivó en una sequía de 17 años hasta lograr el Anual de 1940 y de 13 años hasta que se logró el Competencia de 1936.

Por otro lado si analizamos aquellas primeras cinco temporadas los títulos Anual, Honor y Competencia se repartieron entre cuatro equipos: Atlético, All Boys, San Martín y San Pablo.