Advierten que Tucumán sufrirá otro verano con dengue

El ministro de Salud de Tucumán, Luis Medina Ruiz, reconoció que existe una fuerte presión epidemiológica en la región y que se registrarán más casos en la provincia.

fotos na - afp - la gaceta / foto de osvaldo ripoll fotos na - afp - la gaceta / foto de osvaldo ripoll
03 Enero 2024

Que haya casos de dengue autóctono en la provincia en este verano será inevitable. El ministro de Salud de la Provincia, Luis Medina Ruiz, lo reconoció a LA GACETA, aunque destacó la importancia de las medidas de prevención para ralentizar su aparición y acotar su impacto en la población. Mientras tanto, al cierre de esta edición, se espera el resultado de laboratorio de cuatro o cinco casos sospechosos en estudio. Desde que se tomaron las muestras en los enfermos, se desplegaron las acciones que se disponen ante esta situación.

Esto se debe a que en Tucumán las alarmas nunca dejaron de sonar luego de que en 2023 la provincia registrara casos récords de la enfermedad, por lo que el trabajo preventivo y de concientización no se detuvo. Por eso, cuando se detectó el primer caso importado de la enfermedad tras 148 días en cero, el 27 de diciembre, los equipos de salud ya tenían aceitados los protocolos que se repiten mientras se espera la aparición de más positivos.

Al respecto, el ministro amplió: “hay muchísimos casos de dengue en la región junto a una gran circulación de personas, que causan una importante presión epidemiológica; por eso, aunque los casos que tenemos en estudio son de pacientes que vinieron de Chaco y de Paraguay, no se descarta que aparezcan locales en las próximas semanas”.

Para evitar ello o retrasarlo lo más posible, el funcionario indicó que incluso durante los últimos feriados se han llevado adelante operativos en Yerba Buena y en la capital, en un trabajo que se realiza codo a codo con los gobiernos locales. “Esto es una amenaza inminente ya que si hay una consulta tardía, los pacientes van a ser picados por mosquitos y si hay mucho desarrollo de estos vectores hay posibilidad de que el contagio se extienda rápidamente”, explicó.

“Cada vez que aparece una persona con fiebre y dolor de cuerpo, nosotros lo consideramos sospechoso y eso genera una activación de todo los equipos en el área local; el área operativa; el área de responsabilidad y el equipo de salud ambiental y también la dirección de epidemiología”, enumeró Medina Ruiz, remarcando que “hay varios equipos que trabajan para poder frenar y bloquear el foco, por lo que necesitamos de la consulta precoz”.

Sin límites

Para erradicar al Aedes aegypti, la cartera sanitaria ha entendido la importancia de unir esfuerzos trabajando en conjunto con los municipios para abarcar la mayor cantidad de territorio posible.

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En ese sentido, desde hace cuatro años Yerba Buena ha aplicado el conocimiento científico en la batalla de combatir el dengue y es uno de los lugares con mayor cantidad de datos y muestreos de las poblaciones de mosquitos, gracias a investigaciones que se realizan con varios institutos. Uno de ellos se lleva adelante junto al Conicet y busca analizar similitudes entre las zonas de criaderos para que el municipio diseñe políticas públicas específicas para erradicarlos.

“Este tipo de estudios también nos permite tomar decisiones públicas como fumigar o no fumigar, teniendo en cuenta que en esta acción se arrojan venenos al ambiente, por lo que no es una determinación que se tome a la ligera”, Pablo Quiroga, secretario municipal de Ambiente y Servicios Urbanos.

Otra apuesta fuerte de la intendencia de Pablo Macchiarola es el descacharreo, con una particularidad que tiene por objetivo hacerlo más eficiente: la app Yerba Buena Digital, una aplicación que los vecinos pueden instalar en sus teléfonos para denunciar basurales o pastizales altos para que los equipos de limpieza se encarguen de erradicarlos.

Quiroga agrega que las investigaciones también dejaron al descubierto dos puntos claves donde se ha puesto el foco en el último tiempo, como son el mantenimiento de las escuelas y de los cementerios durante las vacaciones. “Si bien se viene pidiendo que no se dejen recipientes con agua, los de esas zonas evidentemente están aportando un factor de riesgo por lo que se está trabajando en hacer un manejo distinto para disminuir el peligro”, precisó.

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Por su lado, la Municipalidad de San Miguel de Tucumán encaró capacitaciones a más de un centenar de promotores ambientales y agentes de varias reparticiones para brindarles herramientas eficientes. “Se ha convocado a diferentes direcciones. Hay personal de la Secretaría de Servicios Públicos ya que ellos son los que nos van a acompañar en las actividades de descacharreo con su maquinaria y los camiones; de la Dirección de Salud Ambiental; de la Dirección de Ambiente y de la Dirección de Salud Municipal”, contó la secretaria de Ambiente y Desarrollo Sustentable, Julieta Migliavacca.

“Una sola persona o un solo equipo no va a poder prevenir el dengue, tiene que ser un trabajo interdisciplinario”, detalló y sentenció: “vamos a trabajar con brigadas de prevención de dengue para que sostenidamente todos los días tengamos operativos en distintos barrios de San Miguel de Tucumán, concientizando a la población en estrategias para que ante una suba de casos, tengamos menos población de mosquito y con ellos menos contagiados”.

Todo lo mencionado, más el trabajo articulado con el Siprosa que brinda datos de los casos positivos y sospechosos para actuar en los domicilios de los pacientes, se fusionan en la lucha diaria de la erradicación del mosquito 

(Producción periodística: Ariane Armas).

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