21 Enero 2024
INSÓLITO. La delegación de San Pablo se quedó en la puerta del estadio de la Liga Metanense, junto a los hinchas que viajaron desde Tucumán.
Fue cuanto menos desprolijo lo que sucedió esta tarde en Metán. El duelo revancha entre Talleres y San Pablo, por las semifinales de la Región Norte del Regional Federal Amateur, que estaba programado para las 18.30 e iba a definir al rival de Altos Hornos Zapla, finalmente no se jugó. “Se informa que el partido será reprogramado para mañana por el estado del campo de juego tras las lluvias intensas”, anunció un medio metanense a las 17.21.
Sin embargo, las suspicacias quedaron flotando en el aire desde el primer momento. ¿La cantidad de hinchas que llevó San Pablo a esa ciudad podría haber sido determinante para esta decisión? En el “paulistano” creen que puede haber tenido alguna injerencia.
¿SE PODÍA JUGAR? El árbitro Guido Medina decidió que la cancha no estaba en condiciones de recibir el partido entre Talleres (M) y San Pablo.
Según advirtieron desde la delegación visitante, fueron más de 600 los simpatizantes tucumanos que habían llegado a Metán con la intensión de alentar al auriazul. Las boleterías se habían habilitado, pero solamente se vendieron 200 tickets y nunca se abrieron las puertas del estadio.
“Nosotros en Tucumán los recibimos muy bien, no pusimos limitación en cuanto a la cantidad de hinchas y habíamos pactado lo mismo para el partido de vuelta. Sin embargo, aquí nadie nos recibió, nadie dio la cara; ni el presidente ni el ‘vice’. Nadie. No estamos de acuerdo con la decisión que tomaron. Nuestra gente es humilde, vinieron más de 600 personas y están tirados en las ruta porque no abrieron las puertas de la cancha. Eso no es justo, merecen respeto”, disparó Cristian Ibáñez, presidente “paulistano” visiblemente ofuscado por el contratiempo.
Los videos que circularon en las redes sociales mostraban un campo de juego en condiciones de recibir un partido a pesar de la persistente lluvia que había caído por esas horas.
A las 17, el árbitro catamarqueño Guido Medina recorrió el campo junto a sus colaboradores y tomó la decisión incluso antes que la delegación de San Pablo arribara al estadio. En una de las tantas imágenes que circularon, se vio a uno de los arqueros del local recorrer varios metros mientras hacía picar la pelota con sus manos, y el movimiento parecía natural.
San Pablo ya había vivido una suspensión similar en cuartos de final cuando visitó a Bella Vista y el juego fue interrumpido a los 30 minutos por una tormenta. En aquella jornada, el juez Rodrigo Ballestero aguardó más de una hora para ver si las condiciones del campo mejoraban. Sin embargo, como eso no ocurrió, finalmente el partido se reprogramó para el día siguiente.
“Aquí ni nos dejaron pasar al estadio, nos cerraron todo. El campo de juego esta mucho mejor que el día que lo suspendieron en Bella Vista. Mañana volveremos y daremos pelea como siempre; esto un poco muestra la inseguridad que sienten. Por eso vamos a ir por todo”, aseguró Dante Pérez, uno de los entrenadores de San Pablo.
En medio de un mar de dudas y un sinfín de especulaciones, finalmente la delegación “paulistana” debió regresar a Tucumán por no poder solventar los gastos para concentrarse una noche más en Rosario de la Frontera.
Mañana a las 14, viajarán rumbo a a Metán para disputar un partido que ya comenzó a levantar mucha temperatura.
NOTICIAS RELACIONADAS
Lo más popular
