En vísperas de su mensaje ante el Congreso, el presidente, Javier Milei, descartó un levantamiento social en Argentina. Sin embargo, hizo una excepción respecto de la presencia de extranjeros y, de paso, defendió su plan de gobierno.
El Presidente afirmó que la salida del cepo, que podría darse a mitad de año, sería un “punto de despegue” para la Argentina. En una entrevista al diario económico inglés Financial Times, Milei aseguró que insistirá con las reformas que no pudo sacar todavía, sobre todo después de 2025.
Lo que dicen los libros
“Estoy haciendo lo que los libros dicen que debo hacer”, afirmó. Además descartó un levantamiento social en medio de su gestión, aunque marcó una excepción en caso de que haya “infiltrados extranjeros” en el país.
“Hay cero posibilidades de que se produzca un levantamiento social, a menos que haya un evento motivado desde la política o (uno que involucre) a infiltrados extranjeros”, aseguró.
El libertario dijo que activistas de Venezuela y de Cuba participaron de las últimas protestas contra su administración “disfrazados de fotógrafos”. “Los gobiernos de izquierda trabajan juntos para intentar sabotear a aquellos que no son como ellos”, insistió.
No se sale por arte de magia
En relación al alto índice de pobreza, que llegó a más de 57% en enero, según la Universidad Católica Argentina (UCA), el Presidente remarcó que no se sale “por arte de magia” sino con “capitalismo, ahorro y trabajo duro”.
Convencido de que con sus medidas evitó la hiperinflación en el país, como ya hizo otras veces Milei dijo que el objetivo es continuar con la baja en el indicador y terminar de limpiar el balance del Banco Central. “Una vez que el Banco Central esté limpio, planeamos levantar los controles cambiarios. El Fondo Monetario Internacional (FMI) estima que podríamos hacerlo a mitad de este año”, precisó.