Un hombre fue detenido en Pensilvania, en los Estados Unidos, después de que intentara dispararle a un pastor durante una misa en una iglesia, que estaba siendo transmitida en vivo. Así, el dramático momento quedó grabado y las autoridades divulgaron luego el argumento que dio el atacante: “Dios le dijo que lo hiciera”.
El caos en la iglesia Morada de Jesús, en North Braddock se registró el domingo durante la misa en vivo, indicó la policía estatal en un comunicado de prensa. El intento de homicidio fracasó porque el arma se trabó cuando el atacante quiso disparar. Al ver al hombre, identificado como Bernard J. Polite, de 26 años, el pastor intentó refugiarse detrás de un atril.
Polite es residente de Braddock y entró a la iglesia poco después de las 13 y caminó hacia el reverendo Glenn Germany, que al momento ofrecía un sermón. El pastor dijo al canal WTAE-TV en Pittsburgh que el atacante le sonrió e hicieron contacto visual justo antes que el agresor le apuntara con el arma.
"Dios me salvó", comentó el reverendo, quien dirige la iglesia Jesus Dwelling Place en North Braddock, un suburbio de Pittsburgh.
Cuando se dieron cuenta de que el arma se había trabado, un feligrés se lanzó contra Polite y lo redujo. A él se sumó Germany para intentar quitarle la pistola al hombre que se resistió durante unos segundos hasta que se vio superado. El agresor fue retenido hasta que llegó la policía y se lo llevó detenido.
De acuerdo a las autoridades, Polite argumentó que “Dios le dijo que lo hiciera” y que planeaba disparar contra Germany y “esperar a ser arrestado” para poder ir a prisión y aclarar su mente. Ahora, enfrenta varios cargos, entre ellos agresión agravada e intento de homicidio, y este lunes se encontraba detenido sin derecho a fianza en la cárcel del condado Allegheny.
Pero el terror se hizo aún mayor cuando la policía fue a la casa en la que Polite estuvo poco antes de tratar de dispararle al pastor. Allí encontraron a un hombre muerto con herida de bala. La oficina forense lo identificó como Derek Polite, de 56 años, de North Braddock, pero no aclaró si estaba relacionado con Bernard Polite, aunque se estima que es un familiar.
Polite no era conocido en la iglesia, dijeron las autoridades. Se acercó al templo después de escuchar música que provenía de allí, según documentos judiciales. Una vez que llegó la policía, el pastor informó que Polite parecía sufrir trastornos mentales y que se disculpó, diciéndole que escuchó voces en su cabeza que lo animaban a dispararle.