Por Gonzalo Cabrera Terrazas
09 Junio 2024
DIEGO ÁRAOZ/LA GACETA
¿Hasta cuando Darío Sand? Es la pregunta que se hicieron los hinchas de San Martín y de Güemes, durante el empate sin goles; un resultado que pinta positivo para el “santo” por cómo se dio el juego. Claro, el dato que resalta es que arquero correntino batió la marca de Carlos Barisio y sigue agigantando su figura.
El remate desviado de Luciano Pizzaro fue la última chance que tuvo el local, que estuvo más cerca de quedarse con los tres puntos. ¿Por qué no lo logró? Simplemente por la incidencia que tuvo el número “1”. Sí; Sand no paró ni un segundo de “salvar” a San Martín.
El equipo de Marcelo Vázquez aprovechó la levantaba de los últimos juegos y le hizo sentir el rigor a San Martín. Cinco acciones de peligro tuvo el “gaucho” para ponerse en ventaja, pero el arquero se las ingenió para que su equipo pueda rescatar un punto importante de la visita a Santiago del Estero. Ahora, ¿por qué pasaron tantos sobresaltos los dirigidos por Diego Flores?
En las horas previas al partido, el DT había sorprendido con la formación titular. Ante la ausencia obligada de Agustín Dattola por acumulación de tarjetas, se decidió por Guillermo Ferracuti.
Al lateral izquierdo le costó demasiado complementarse con Juan Orellana y generó inseguridad en el fondo. Tal es así, que dos de las enormes tapadas de Sand llegaron por errores del ex Deportivo Maipú. Para colmo, Tiago Peñalba jamás pudo desarrollar su tarea con comodidad por el lateral derecho.
Una de las falencias que mostró San Martín en el torneo fue ante la presión alta del rival y Güemes apostó a eso y le generó peligro.
Mientras tanto, el medio campo “santo” se mostró inconexo. Gustavo Abregú no encontró casi nunca a Pablo Hernández, que recibió muchas faltas por tratar de darle una pausa al juego. Además, Iván Molinas volvió a dejar una deslucida imagen.
A pesar de que Lautaro Fedele tuvo la primera situación de peligro a cuatro minutos, el “santo” no generó mucho más. Entró en un bache futbolístico y sus chances de salir victorioso de “la isla” bajaron considerablemente.
Flores cambió las piezas en el complemento y el equipo mejoró. Apostó por los chicos del club y mandó a la cancha a Ulises Vera, Nicolás Moreno y Agustín Prokop. Si bien Matías García y Gonzalo Klusener aportaron algo de frescura (al delantero no le cobraron un claro penal sobre el cierre del partido), lo cierto es que el futbolista que mejor ingresó (otra vez) fue Vera.
El volante, que había sumado 12’ en el triunfo contra Alvarado, se ubicó como lateral derecho y además colaboró en la mitad. Con su velocidad y picardía logró romper los bloques del “gaucho”.
Más allá de esa proyección y de un cabezazo de Gonzalo Rodríguez (cabeceó a las manos del arquero desde una posición inmejorable), San Martín no pasó del cero y debió conformarse con terminar la primera rueda en la segunda posición.
Sin volumen de juego y con algunos errores atrás, el “santo” sumó un punto; en gran parte gracias a un Sand sencillamente genial.
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