Por Mariana Apud
10 Junio 2024
CONFIANZA. Los Tarcos manejó los tiempos del partido y fue justo ganador en el duelo contra Atlético. Aparicio jugó bien y es una de las revelaciones del “rojo”. Foto de Analia Jaramillo/LA GACETA
Ante el pedido de la entrevista Thiago Aparicio se para con firmeza y dice con voz frágil, opuestamente a su actitud, “sí”. Nada hace suponer que fue el goleador del partido en el que Los Tarcos le ganó a Atlético Tucumán por la sexta fecha del torneo Anual masculino.
El delantero anotó dos de los tres goles del equipo que dirige Sebastián Molina. Aparicio está en eso de amoldarse al nivel que tiene, distinto a las etapas que se pueden considerar como lógicas. “Es chico. Ante el reportaje es tímido. En el día a día no lo es tanto”, confió alguien del cuerpo técnico que lo conoce bien.
Partiendo de ese dato, claramente, el jugador se siente más cómodo expresándose en el deporte. Con apenas 15 años ya es jugador de la Primera, sin haber hecho el camino tradicional de pasar por Sub-19 e Intermedia.
“Rápido y habilidoso”, en dos palabras contundentes se definió el alumno de la Escuela de Comercio N° 1. Su otra cualidad es la que permitió la fluidez del juego de Los Tarcos contra Atlético. “Compañero”, es el otro adjetivo con el que se describió.
Para Molina, que Aparicio porte esa actitud de no tener mezquindad, algo que abunda en ese puesto en los deportes colectivos, es uno de los motivos para haber apresurado su convocatoria a Primera. “Es muy inteligente”, elogió el DT.
La percepción ya la tenía desde que el joven revoloteaba por el club. Los integrantes de su familia también juegan al hockey y él no pudo escaparse, o mejor dicho, no quiso hacerlo. Al Aparicio le gusta practicar deportes desde los seis años. “Hice durante cuatro años taekwondo y sigo jugando al fútbol”, explicó.
Dar patadas sobre el tatami no prosperó. Usar sus piernas para dominar la pelota, sí. Pero la prioridad la tiene el jugador de hockey. Lo de él viene más por el lado de la habilidad, la máxima que pueda lograr, para conseguir la plenitud en el deporte que le ganó a las otras dos actividades deportivas.
“Me gusta meter goles, por eso siempre fui delantero”, indicó el jugador sobre sus inicios. Así que no llama la atención que en el campo de juego de fútbol ocupe un punto en el ataque. “Soy el ‘9’ en el equipo del CEF 18”, reveló Aparicio.
El malestar que venía sintiendo el jugador en las últimas semanas desapareció en el minuto 49 del duelo que se jugó en el complejo José Salmoiraghi, en la cancha de arena que tienen los “decanos”.
FÚTBOL. Con la redonda tiene el mismo objetivo que con la bocha: hacer goles.
De las seis fechas que se jugaron por el torneo que organiza la Asociación Tucumana, el delantero no se sentía muy en consonancia con lo que Los Tarcos viene exhibiendo: un despliegue de juego que lo habilitó a seguir invicto. “Me emocioné cuando marqué el gol porque yo no venía jugando bien”, dijo Aparicio. Hasta aquí, Los Tarcos sumó goles en todos los partidos: empató ante Monteros Vóley 1-1, derrotó a Cardenales 3-2, perdió contra San Martín 3-2, goleó 5-0 a Famaillá y derrotó 3-0 a Atlético. “Esto me subió el ánimo”, explicó. “Me gusta la música por eso hice el bailecito”, agregó.
En su primera conquista el delantero se paró frente a sus compañeros y metió “pasito” animadamente. “Les dije que lo iba a hacer como brasileño”, explicó.
El jovencito estuvo lejos de la versión carioca que mundialmente, y sobre todo en el Mundial de Qatar 2022, popularizó Lucas Paquetá. El centrocampista suele “desarmarse” moviendo hombros, piernas y cintura cada vez que marca un gol. “Les había prometido que lo iba a hacer”, dijo Aparicio con respecto al singular festejo que alargó más la sonrisa de todos por el gol que había marcado.
Aparicio viene de sorpresa en sorpresa. Al salto de categorías se le sumó otro hecho. “El DT me dijo que entrene con el plantel superior y en la primera fecha ya me llamó para jugar”, contó sobre su evolución. “Jugué ocho partidos: dos de titular y seis de suplente”, detalló el dueño de la camiseta número dos de los “rojos”.
“Me sorprendió también cuando me dijeron que iba a viajar a la Súper Liga; la disfruté mucho”, reconoció el joven que formó parte de la delegación que compitió en Santa Fe y logró un segundo puesto. Ese rendimiento le permitió mantener la plaza tucumana para el campeonato nacional de clubes 2025.
RETIRADO. Aparicio practicó taekwondo un par de años. No lo llegó a conquistar.
Si bien todo pinta para un desempeño prometedor en el deporte del palo y la bocha, puede que opte por un modo de ganarse la vida fuera del deporte o, si se puede, llegar al equilibrio. “Dedicarme profesionalmente al hockey es una opción, pero tengo pensado entrar a la Gendarmería”, anticipó su plan que sigue marcado por las tradiciones familiares, ya que sus tíos forman parte de la fuerza nacional.
Para tomar esa decisión falta un tiempo. En lo inmediato, busca encajar más todavía en la consolidación de la versión masculina de Los Tarcos. En su vitrina ya tiene dos medallas con los “rojos” y no se quiere perder la que se propuso ganar el equipo en 2024 que es la del Anual. Precisamente, el próximo fin de semana, el campeón defensor y ganador del Iniciación, Huirapuca, lo visitará. Un muy buen parámetro para Aparicio y sus compañeros en el que intentarán mantener el invicto con su poder goleador.
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