04 Agosto 2024
Foto tomada de Olé.
“Tarda en llegar, y al final hay recompensa”. Novak Djokovic alcanzó el único trofeo que le faltaba: la medalla de oro de los Juegos Olímpicos de París 2024. El serbio venció 7-6 (3) y 7-6 (2) a Carlos Alcaraz, rival que le ganó en la final de Wimbledon. Sin embargo, “Nole” protagonizó un punto de película y se mostró emocionado frente al público.
Tras conseguir la victoria, el serbio se tiró al suelo a llorar. Una de las cámaras le hizo zoom a su mano y se pudo ver que le temblaba por los nervios del momento. Luego, el tenista se paró y corrió hacia las tribunas para reencontrarse con sus familiares, que los esperaban conmovidos para abrazarlo. Así, el serbio saltó los protocolos y lo buscó en la tribuna.
Inmediatamente, los fanáticos tomaron varias fotos por tener cerca a su ídolo y fueron varias postales que se volvieron virales. Una de ellas tuvo como figura a su hija, a quien alzó en medio de la grada.
No se vacuno, no se puso enfermo, lo deportaron, lo trataron como escoria, lo señalaron, lo maltrataron, insultaron, lo discriminaron, como a muchos de vosotros, de nosotros. DJOKOVIC es el mejor jugador de la historia del Tenis. Freedom Always Wins. pic.twitter.com/YO2RpUymyN
— IUSTITIA EUROPA (@IustitiaEuropa) August 4, 2024
Djokovic ganó la medalla de oro en París 2024, el único título que le faltaba
En un partido atrapante en el que apenas se sacaron ventajas, el tenista serbio Novak Djokovic se quedó con la medalla de los Juegos Olímpicos París 2024, al derrotar por un doble 7-6 al español Carlos Alcaraz. Así, a los 37 años, el mejor tenista del mundo hizo historia al conseguir el único título que le faltaba a su brillante carrera.
Después de los Juegos Olímpicos de Beijing 2008 (bronce), Londres (2012), Río (2016) ni Tokio (2021), Djokovic tenía la medalla de oro de París 2024 casi como una obsesión.
Frente al español Alcaraz, que venía de vencer en la final de Wimbledon, "Nole" mostró una vez más su mejor repertorio para sacar adelante un partido por demás parejo, que el resultado reflejó fielmente.
El festejo eufórico y junto a su familia dejó en claro cuánto deseaba Djokovic colgarse la medalla dorada, la única joya que le faltaba a la corona que, si quedaban dudas, lo ubica entre los dioses del Olimpo del tenis mundial.
Lo más popular
