31 Agosto 2024
Estos son los consejos del Ministerio de Salud de la Nación para cuidar un pie diabético.
Es frecuente que con el paso del tiempo las personas con diabetes desarrollen heridas en los pies. Para prevenir estas afecciones que pueden provocar infecciones graves es importante saber cómo deben cuidarse las personas que ya hayan sido diagnosticadas con la enfermedad.
La insulina ayuda a la glucosa a ingresar a las células para producir energía. Pero los pacientes diabéticos pueden tener deficiencias en la producción de insulina. Si la glucosa se acumula, provoca que aumenten los niveles de azúcar en sangre y consecuentemente empieza a dañar las células de los tejidos.
La diabetes afecta vasos sanguíneos y nervios de distintas partes del cuerpo como los pies. También afecta los codos y los ojos. El cuidado correcto de los pies evitará complicaciones.
Cómo cuidar un pie diabético
Inspección completa
La inspección de los pies debe realizarse todos los días. Con ayuda de un espejo se deben observar las plantas, el dorso y los espacios entre los dedos de los pies. Reconocer si hay ampollas, grietas, callosidades, enrojecimientos o lastimaduras. Si se observan cambios, consultar con un especialista.
Higiene
Lavar los pies a diario con agua tibia entre cinco y diez minutos para no dañar la piel. Controlar la temperatura con la mano o con el codo. Secar con una toalla sin raspar. Se puede utilizar un secador de cabello con aire frío. Los espacios entre los dedos debe estar siempre limpios y secos.
Cuidado de piel, uñas y callosidades
Cortar las uñas en línea recta y limar con lima de cartón para evitar que se encarnen. Si es posible, que lo haga un familiar o podólogo. Aplicar cremas hidratantes en talón, planta y dorso evitando aplicar entre los dedos.
Calzado
Evitar caminar descalzo, sobre todo sobre arena o piso caliente. Usar siempre medias de algodón, flojas, de colores claros sin costura o con las costuras hacia afuera. Elegir siempre calzados cómodos y no apretados para evitar la aparición de ampollas. Usar calzados anchos, de puntas redondeadas para evitar el encimamiento de los dedos.
Ejercicios y posturas
Para favorecer la circulación sanguínea, levantar el pie cuando esté sentado. Mover los dedos y los tobillos. No permanecer con las piernas cruzadas durante mucho tiempo.
Signos del pie diabético
Controlar las uñas
Si las uñas se ponen gruesas o amarillentas se de debe consultar con un equipo de salud. No cortarse callos o durezas porque pueden producir heridas y no autorecetarse callicidas porque pueden dañar la piel. Asistir con un podólogo y no usar instrumentos cortantes ni punzantes.
Irregularidades en el pie
Si se detectan dedos encimados, pie plano o juanetes pronunciados, consultar con su médico tratante.
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