Estelares brindará su show esta noche a las 21 en el Palacio de los Deportes. La exitosa banda que se fundó en 1994 en La Plata lleva ya tres décadas en los escenarios, y sigue sumando presentaciones en el país y en el exterior.
Tras su paso por Colombia y México, donde ya tocaron en el marco de una nueva gira por Latinoamérica, la banda conformada por Manuel Moretti (voz), Víctor Bertamoni (guitarras), Pali Silvera (bajo), Javier Miranda (batería), Guillermo Harrington (guitarras y coros) y Eduardo Minervino (teclados), retoma su tour por el país para presentar su último álbum. Y en una entrevista con LA GACETA Moretti adelantó que han grabado un single, “She”, y que en febrero o marzo publicarán un disco nuevo. “En ‘Mar de soles rojos’ hay canciones dramáticas porque vivíamos en un mundo de zombis en la pandemia, pero también está la esperanza que refleja el reencuentro de la banda”, cuenta el líder del grupo.
El artista publicó el libro “Demasiadas pocas cosas”, incluida en “Sistema Nervioso Central”, el disco con el que Estelares pegó el gran salto; allí también estaban “Aire”, “Ella dijo” y “Un día perfecto”, todos convertidos en hits. “Disfrutamos mucho el sonido en vivo”, agregó.
El músico no respondió sobre el contrapunto que mantuvo recientemente con el director técnico de Sarmiento (Junín), club del que es fanático.
- “Mar de soles rojos” se toca por primera vez aquí. ¿Hay algún cambio en el sonido, en las letras o en la misma música?
- Nuestro show tendrá algunas canciones del nuevo disco, pero también los éxitos de todo el tiempo. Estamos muy contentos con temas como “Este despertar”, “Encantan” y “Tiempos dorados”, entre otros; tocaremos cuatro de “Mar de soles rojos”. Pero haremos un recorrido por otros álbumes, que la gente quiere escuchar y a nosotros nos gusta interpretar.
- Supongo que al ser de 2022, habrá mucho que hable del aislamiento de la pandemia…
- Salvo “Club de remo” todas las canciones las compuse durante la pandemia. En ese tiempo tocamos cuatro veces al aire libre; hay canciones que sirvieron para darle vida y salir a mostrar y de gira. Es un disco de corazón, de luz, pero hay canciones dramáticas; sentíamos que vivíamos un universo de zombies, así nos sentimos todos. En “Este despertar” y en “Miedo” se habla claramente de eso, de la inseguridad, la incertidumbre, porque no se sabía qué iba a ocurrir, pero también hay algo esperanzador. El álbum es una fotografía muy grata del encuentro entre nosotros cuando grabamos ese disco. No podíamos dormir, creemos que nadie podía dormir. Íbamos por los instrumentos por las noches para espantar a los fantasmas, pero fue inútil, los temas más acuciantes no dejaban de golpearnos a la puerta. Escribimos sobre el miedo, sobre la paternidad, sobre el futuro incierto, sobre la desesperación, sobre la esperanza. Pero después de “Mar de soles rojos”, grabamos la versión de ese clásico “El gato que está triste y azul”, que cantó Roberto Carlos, “Hacerlo bien” y “200 monos”.
- ¿Cómo se encuentra la banda en esta situación económica? Tienen shows, o el trabajo se redujo…
- Estamos en una época extraña, en la que el país está tan sensible y con tanta modificación, pero no paramos de estar gira. Estamos con mucho trabajo. En 2022 y 2023, y este año continuamos con giras en México, Colombia. Hicimos Jujuy, La Rioja y Mendoza, seguimos con el Oktoberfest, ocho shows en España. Es un año con mucho mucho trabajo y disfrutando del sonido en vivo. Hace un mes grabamos un nuevo tema, “She”, que es la historia de una chica muy lúcida pero muy salvaje. Estamos trabajando en un disco nuevo que podría salir en febrero y marzo. Por ese lado, estamos muy contentos. El año pasado hicimos nuestro primer Luna Park y salió un documental, y eso mismo se lanza con “Esas mágicas canciones”, nuestro último disco en vivo. En diciembre despedimos el año en el Gran Rex, pero aquí, en el país.