En la historia de Nicolás Varrone, al igual que en la de Franco Colapinto, el karting fue el punto de partida de una carrera sin techo. Tanto el piloto de Pilar como el de Ingeniero Maschwitz (también provincia de Buenos Aires) hicieron en el kartódromo sus primeros palotes y allí se conocieron. Impulsado por el ascenso de Colapinto con Williams, Varrone acaricia las chances de llegar a la Fórmula 1. De la mano de General Motors, el joven campeón del mundo de resistencia (WEC) en la categoría LMGTE Am podría subirse al desembarco proyectado en 2026 con la marca Cadillac. En el proyecto está implicado el ex campeón de Fórmula 1, Mario Andretti.
Varrone fue compañero de Colapinto en el Campeonato de Karting Argentino en la categoría junior. Ambos pilotos tienen una amistad, aunque de chicos eran rivales. Pero, con el tiempo, prevaleció la afinidad y el apoyo. En su momento, Varrone expresó un gran entusiasmo al saber que su compatriota y amigo iba a correr en la máxima categoría.
“Con Franco somos muy amigos desde chicos, corríamos en el mismo equipo de karting y los primeros viajes a Europa los hicimos juntos. Me pone muy contento por él. Abrió los ojos no sólo al país sino a la Fórmula 1 de que la Argentina es un país muy fierrero. Esto es algo que abre muchas puertas en muchos sentidos”, dijo Varrone.
Posición prudente
Los corredores bonaerenses son exponentes del modelo del karting como semillero. Y Nico defendió esa "escuela" y hasta llegó a contar en una conversación con Carburando que al principio no tenía presupuesto para correr el campeonato entero. En una entrevista reciente, manifestó: "tengo 22 años y me gustaría que los chicos que están arrancando en el karting digan ‘che, no necesariamente es F1, vean a Nico’. Hice un camino al lado de la F1 y pude triunfar. Espero que los chicos de 8/9 años que están arrancando lo puedan ver. También los pilotos más grandes. Hay varias formas de estar en el exterior y ganar”.
La prudencia de Varrone obedece a que no es seguro que pueda llegar a la F1 en 2026 ya que la escudería tiene en cuenta a otros pilotos, pero el argentino viene entrenando en un simulador desde hace dos años cuando se planteó la posibilidad de llegar a la máxima categoría. Varrone por lo pronto debe terminar de sumar puntos para obtener la superlicencia que lo habilita a correr en las categorías como Indycar, F2 y F1.
El público argentino sueña con tener dos pilotos en la máxima categoría, en la red social X, expresan una ilusión de que corran en el mismo equipo pero deben abstenerse a una realidad. El apoyo mutuo entre pilotos y público es fundamental para lograr alcanzar la mayor visibilidad a ambos equipos así tenga en cuenta a nuestros pilotos argentinos.