Luego de que el gobierno de Javier Milei anunciara la reforma de la legislación migratoria, la ministra de Seguridad nacional, Patricia Bullrich, presentó detalles sobre el nuevo sistema que se implementará para acelerar la expulsión de extranjeros que cometan delitos.
En sus declaraciones, la funcionaria enfatizó que "así como muchos países tienen sus restricciones, Argentina también debe cuidar sus recursos, porque esto implica cuidar los impuestos de la gente".
En su regreso al frente del Ministerio de Seguridad, Bullrich reafirmó su objetivo de modificar el régimen migratorio. Explicó que, actualmente, el sistema permite que los extranjeros cumplan la mitad de su pena y luego sean deportados, pero que, para delitos menores, la expulsión será inmediata. Además, subrayó que se trabajará para evitar el ingreso de personas con antecedentes delictivos. Esta medida, recordó, había sido implementada durante su gestión en el gobierno de Mauricio Macri, pero fue eliminada en 2021.
"La Constitución es clara: ‘Bienvenidos todos aquellos que quieran habitar el suelo argentino’", señaló Bullrich, quien añadió que la bienvenida es para quienes buscan trabajar y desarrollarse, pero no para aquellos que vienen a delinquir. Con una ironía contundente, manifestó: "Bastante tenemos con los delincuentes argentinos como para además tener delincuentes extranjeros". Afirmó que su equipo ya está trabajando en las modificaciones necesarias al Código Penal para garantizar expulsiones rápidas.
En una entrevista con el canal de televisión porteño "La Nación+", la ministra explicó que se están creando nuevas figuras penales para permitir las expulsiones expeditas, y citó como ejemplo la reciente recaptura de un delincuente dominicano, condenado por narcotráfico, que había intentado huir a Paraguay. "Este individuo será expulsado a la República Dominicana", adelantó, reconociendo el trabajo conjunto de la Policía Federal Argentina (PFA), la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) y la Policía de Paraguay.
Bullrich también se refirió al preámbulo de la Constitución Nacional, que, según destacó, "es una invitación a la buena fe, pero no a la criminalidad". Subrayó la necesidad de endurecer las políticas migratorias, defendiendo la idea de que, al igual que otros países, Argentina debe proteger los recursos de sus ciudadanos. "Es cuidar los impuestos de la gente", insistió.
En paralelo, el vocero presidencial, Manuel Adorni, explicó que las reformas buscan una legislación alineada con las normas internacionales. Entre las medidas, se incluiría la penalización del reingreso de extranjeros expulsados, tanto por infracciones migratorias, como por delitos cometidos. También se establecerán penas para quienes violen los requisitos migratorios, como ingresar al país con documentación falsa o con intenciones distintas a las declaradas.
A favor del cobro a extranjeros
Además, Bullrich defendió la implementación de un arancel a los extranjeros que utilicen los servicios de salud o estudien en universidades nacionales. Consideró que esta medida representaría un retorno de los impuestos pagados por los ciudadanos. "Es una forma de compensar la situación cuando profesionales formados en Argentina se van a ejercer a otros países", explicó, según consignó el sitio de noticias Infobae.
Destacó que esta medida dependería de la decisión de cada institución, pero remarcó que las universidades deben entender que reciben recursos públicos y deben cuidarlos. "Si los extranjeros no tienen injerencia en la vida política argentina ni pagan impuestos, no pueden recibir estos beneficios", afirmó, refiriéndose tanto al acceso a la educación superior como a la atención médica.
Por último, la ministra planteó que las universidades privadas ya se benefician económicamente con la matrícula de estudiantes extranjeros, lo que genera un crecimiento económico en las áreas cercanas a los campus. "¿Por qué no podemos hacer lo mismo con las universidades públicas?", cuestionó.