Los concejales capitalinos enfrentarán sus posturas con respecto al transporte de pasajeros en la sesión extraordinaria de hoy. En el recinto, se debatirá un proyecto que dispone que los únicos habilitados a utilizar plataformas electrónicas sean los conductores adheridos al Sutrappa. Además, se cuestiona la vigencia de las motos como transporte público, sistema que ya había sido prohibido mediante una ordenanza de 2002.
El dictamen de la comisión de Transporte establece la modificación de la normativa N° 3.713 del Sutrappa. Allí se añade la modalidad de traslado de pasajeros a través de plataformas electrónicas y a través de Empresas Redes de Transporte (ERT), donde la prohibición de los vehículos particulares se manifiesta de manera indirecta. El articulado no menciona explícitamente la no permisibilidad de funcionamiento para los conductores de Uber, Cabify o Didi, pero sí determina que serán sancionados aquellos “conductores y/o vehículos que prestaren el servicio en la modalidad Sutrappa a través de plataformas electrónicas sin estar autorizados para esa modalidad”, es decir, sin pertenecer al Sistema Único de taxis.
Por su parte, incluye un artículo sobre los requisitos que tendrán las ERT. Entre ellos, se menciona la inscripción en la Dirección de Ingresos Municipales, debiendo fijar domicilio fiscal; información sobre los prestadores del servicio; y aceptar la competencia judicial de los tribunales ordinarios de la Provincia. También establece que se aplicarán multas a las agencias y ERT que no cumplan con cualquiera de las obligaciones administrativas dispuestas en la ordenanza.
Con el propósito de motivar a los vehículos particulares a adherirse al Sutrappa, el dictamen añade que el Departamento Ejecutivo deberá “realizar un llamado a inscripción de aspirantes de licencia del Sutrappa, de acuerdo a las vacante que existieran”. Los que no entren en ese cupo funcionarían dentro de la ilegalidad, según la normativa, y podrían recibir multas. “La idea del proyecto es que los autos que trabajan de manera ilegal de modo particular -solamente con aplicaciones- puedan ingresar al Sutrappa. Por eso es que se le pide al Departamento Ejecutivo que sortee más licencias para que tengan la oportunidad de entrar en el sistema y trabajar de manera legal”, explicó Ernesto Nagle, referente del bloque peronista e impulsor del escrito.
El artículo seis del documento dispone la incorporación de un ítem que se refiere a las motocicletas. “Queda expresamente prohibida la prestación del servicio en cualquiera de las modalidades expresadas en el artículo precedente a través de moto vehículos”, reza el punto que se propone incluir. “Estamos buscando cómo regularizar el tema de las motos: creció mucho la cantidad de gente que trabaja de manera ilegal y, además, según los informes de salud creció el número de accidentes en estos vehículos”, fundamentó Nagle. Sobre la ilegalidad de este sistema, hizo referencia a la ordenanza N° 3.260, de septiembre de 2002, que impone: “prohíbese en el ámbito del municipio de San Miguel de Tucumán el servicio y la circulación de los denominados ‘motos-taxi’, como agencias o en forma particular”, además de las clausuras de las agencias que desobedezcan a la norma.
La discusión en el edificio de Monteagudo y San Martín será intensa, pues no hay acuerdo de todas las fuerzas políticas con respecto al tema. El radical Leandro Argañaraz adelantó que le parece “un escándalo” la iniciativa peronista ya que “a los únicos a los que lleva tranquilidad es a los taxistas, y va a permitir que continúe la persecución contra los Uber en Tucumán”. “En un momento en el que el sistema de transporte público no está dando abasto, están cerrando la puerta a un sistema de transporte privado que funciona bien”, planteó el concejal.
Por otro lado, busca extenderse el máximo de antigüedad de los vehículos de Sutrappa, de 10 a 13 años, y algo similar para los vehículos de transporte escolar.