El ex ministro de Economía, Domingo Cavallo, advirtió sobre el retraso del dólar y dijo que la situación es parecida a la del final de la convertibilidad. El ex funcionario menemista hizo un análisis de la situación en su blog y planteó alternativas para evitar un deterioro mayor en la economía argentina.
“Existe una apreciación real exagerada del peso que puede estimarse en alrededor del 20%. Parecida a la que existió en los tres años finales de la convertibilidad, apreciación real que llevó a una deflación muy costosa porque transformó la recesión que se había iniciado a fines de 1998 en una verdadera depresión económica, fenómeno que comenzó a erosionar el crédito internacional del país y a alentar la salida de capitales”, diagnosticó.
Cavallo enfrentó la posición del presidente Javier Milei, quien sostiene que a diferencia de aquel momento actualmente no hay déficit fiscal y eso hace a su modelo sustentable.
"El argumento de que la recesión iniciada a fines de 1998 y la depresión del período 1999-2001 se debió además a la existencia de fuertes déficits fiscales, no se sustenta en los datos”, argumentó. “Hasta 1998 el déficit fiscal no existió o fue muy bajo. En todos esos años existió superávit fiscal primario”, remarcó Cavallo y agregó: “Es cierto que desde 1997 en adelante las provincias aumentaron mucho su gasto público y financiaron sus déficits con créditos bancarios a altas tasas de interés flotantes, pero tanto en el caso de la Nación como en las provincias, el aumento exponencial del déficit se debió a la suba de la tasa de interés a medida que el país iba perdiendo el crédito internacional, algo que tuvo más que ver con la pérdida de competitividad de la economía que con la evolución de las cuentas fiscales”, explicó.
Al enumerar los efectivos negativos de la "apreciación exagerada del peso", mencionó el aumento de las importaciones y la pérdida de productividad tanto de la industria nacional como del campo, y que "el deterioro de la cuenta corriente de la balanza de pagos hará más difícil la adquisición por parte del Tesoro de los dólares para pagar intereses".
Qué recomendó Cavallo
En cuanto a qué hacer, recomendó "la eliminación temprana de las restricciones cambiarias comenzando por las financieras y avanzar hacia la reunificación en no más de tres meses, anunciando en detalle el funcionamiento del sistema de competencia de monedas con plena autorización para la intermediación financiera tanto en pesos como en dólares”.
“En este caso, el tipo de cambio nominal podría ubicarse a un nivel que induzca la entrada de capitales que el Banco Central debería comprar con recursos del Tesoro para pagar los intereses de la deuda en dólares”, agregó.
Para Cavallo, si bien “esta salida del cepo provocaría un salto cambiario, no tendría por qué interrumpir el proceso de desinflación”.
Pero como consideró, en base a las declaraciones del presidente Milei, descartada esa posibilidad, que el gobierno "podría aplicar algunos paliativos, tales como: 1) reducir las retenciones y aumentar los reembolsos a las exportaciones; 2) reducir transitoriamente los aportes patronales jubilatorios para aliviar el costo laboral sin afectar los salarios de bolsillo de los trabajadores. El costo fiscal de estas medidas será compensado con creces por su efecto anti recesivo”.
“Es natural que las decisiones se adopten teniendo muy en claro cuál puede ser el efecto sobre el resultado electoral del próximo octubre. El apoyo popular es fundamental para que la reforma económica que lidera el presidente Milei tenga éxito”, enfatizó.