Hace 3 Hs
APUNTADO. Lobo Medina recibió múltiples críticas por su actuación en Barracas Central-Banfield.
Luis Lobo Medina es el único árbitro tucumano que dirige en la máxima categoría del fútbol argentino. Incluso, el nacido en Banda del Río Salí hace 40 años es juez internacional a partir de este año lo que le valió transformase en el primer norteño en conseguir ese logro. Sin embargo, este fin de semana volvió a quedar en el ojo de la tormenta luego de sancionar un gol en offside a favor de Barracas Central en el duelo contra Banfield.
Las imágenes de la jugada controversial recorrieron todos los portales y los programas deportivos. No hay ninguna en la que no se vea adelantado a Kevin Jappert (defensor de Barracas autor del gol que sentenció el partido). Incluso ni en trazado de líneas que entregó el VAR, en el que estuvo Fabricio Llobet.
"Esto es un asco", lanzó resignado luego del partido Ariel Broggi, entrenador del “Taladro”, en referencia al arbitraje del tucumano.
Lobo Medina es un juez que “pateó” las polvorientas canchas de la Liga Tucumana y logró escalar cada peldaño de nuestro fútbol. Tras una dilatada trayectoria en el fútbol de ascenso (pasó por todas las categorías), en la temporada 2021/22 pasó a formar parte del elenco estable de jueces de Primera División.
El sueño de Lobo Medina comenzó en la adolescencia
Como en muchos casos, su pasión por la profesión nació en el secundario. A los 16, con sus compañeros había organizado un campeonato para recaudar fondos para el viaje de egresados, Lobo Medina se obnubiló al ver los movimientos que realizaba el referí que habían contratado para impartir justicia durante la jornada. Y entre sus hitos personales, ostenta haberse convertido en el tercer juez tucumano en llegar a la máxima categoría del fútbol argentino (antes lo habían logrado Pedro Argañaraz y Carlos Salado).
“Dirigir en Primera es un sueño. Me costó mucho. Siempre me acuerdo que tenía que dirigir en Garmendia o en Santa Ana. Hacíamos muchos kilómetros en colectivo; ahora tenemos un montón de comodidades que antes eran impensadas”, había dicho el árbitro en diálogo con LA GACETA, en febrero de 2024.
Luego de su última actuación y de haber recibido muchas críticas, LA GACETA intentó comunicarse con él para conocer su opinión. “No puedo hablar; no estoy autorizado”, contestó amablemente.
Que Lobo Medina haya quedado en el ojo del huracán no es algo nuevo para el controversial, polémico y desgastado arbitraje argentino que conduce Federico Beligoy. Las polémicas (y las sospechas) están a la orden del día e invaden la escena casi todos los fines de semana. “Al principio me costaba mucho vivir rodeado de ese tipo de dichos. Eso me llevó a ir al psicólogo para poder sobrellevar la presión. Vivimos en un país muy futbolero en el que no nos gusta perder y siempre hay que buscar algún culpable”, había declarado hace un año dejando en claro que su profesión no está exenta de errores humanos.
Lo más popular
