19 Febrero 2025
Un angustiante episodio se vivió en la segunda ronda del WTA 1000 de Dubai, torneo que reúne a las mejores tenistas del planeta. La británica Emma Raducanu, 61° del ranking mundial y de 22 años, rompió en llanto en pleno partido ante la checa Karolina Muchova (17°) por la presencia de un acosador.
Luego de perder los dos primeros games del partido, Raducanu, campeona del US Open de 2021, se acercó a la jueza de silla y, entre lágrimas, le explicó que había un hombre acosándola desde las tribunas. A continuación, se escondió detrás de la silla, mientras su rival se acercaba a consultar qué sucedía. Tras enterarse, Muchova consoló a la británica, mientras la jueza de silla daba aviso de la situación a través de su handy.
El incidente, según explicó la WTA en un comunicado, tuvo ya un antecedente el día previo al partido, cuando el mismo hombre se acercó a Raducanu fuera de las instalaciones del torneo. “Fue abordada en un área pública por un hombre que exhibía una conducta obsesiva”, detalla el comunicado.
Luego de que la jueza de línea diera aviso de la situación, el acosador fue expulsado del torneo. Según comunicó la WTA, se le prohibirá asistir a cualquier evento organizado por la entidad, mientras se analizan posibles amenazas de su parte.
“La seguridad de las jugadoras es nuestra máxima prioridad y se asesora a los torneos sobre las mejores prácticas de seguridad para eventos deportivos internacionales. La WTA está trabajando activamente con Emma y su equipo para garantizar su bienestar y brindarle todo el apoyo necesario. Seguimos comprometidos a colaborar con los torneos y sus equipos de seguridad en todo el mundo para mantener un entorno seguro para todas las jugadoras”, aseguró la WTA.
El antecedente de Raducanu con un acosador
Este no fue el primer episodio para la tenista británica. En enero de 2022, Raducanu fue perseguida por un individuo llamado Amrit Magar, quien llegó a robar un zapato de su padre y a dejarle notas y regalos extraños.
En aquella ocasión, Raducanu expresó a las autoridades: “Debido a esto, siento que me han arrebatado mi libertad. Estoy constantemente mirando por encima del hombro. No me siento segura en mi propia casa, que es donde debería sentirme más segura”. Magar fue declarado culpable por acoso y recibió una orden de restricción de cinco años, además de una sentencia de convivencia comunitaria de 18 meses.
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