
Una joven de 18 años fue detenida en la cancha de Sacachispas mientras intentaba ingresar a ver un partido contra Acassuso. Aunque ahora es mayor de edad, en enero de 2024 tenía 17 años cuando participó en un violento robo tipo “viudas negras” en San Isidro, liderado por su hermana mayor. La adolescente se encontraba prófuga desde mayo de ese año y era buscada por Interpol. Su captura se dio de forma fortuita cuando los agentes le pidieron el DNI en el acceso al estadio.
El hecho por el que se la acusa ocurrió durante la madrugada del 27 de enero de 2024. La víctima, un hombre que había conocido a la hermana de la detenida por una app de citas, fue drogado en su casa por esta mujer, apodada “Micaela”, quien luego permitió el ingreso de otros tres cómplices, entre ellos la joven ahora arrestada. Entre todos, desvalijaron la vivienda: robaron una camioneta Amarok, cajas fuertes, dinero, relojes, electrónica y documentación personal del damnificado.
Tras su detención, la joven fue indagada por el fiscal de menores Andrés Zárate, pero optó por no declarar. Está imputada por el delito de robo triplemente agravado, lo que conlleva una pena de 5 a 20 años de prisión. Aunque era menor al momento del crimen, el sistema judicial exige que, al haber cumplido la mayoría de edad, cumpla su detención en una cárcel común del Servicio Penitenciario Bonaerense. El fiscal pedirá prisión preventiva este viernes.
La acusada era la única de los cuatro implicados que permanecía prófuga, mientras los otros tres —incluida su hermana— ya se encuentran detenidos, con causas tramitadas en Lomas de Zamora. Según los investigadores, la adolescente era plenamente consciente del pedido de captura que pesaba sobre ella, lo que se agrava por haberse mantenido en la clandestinidad. A su favor, señalan que no cuenta con antecedentes penales previos.