Dónde saborear los mejores espetos de sardinas en la Costa del Sol

Es uno de los grandes emblemas de la gastronomía malagueña.

Dónde saborear los mejores espetos de sardinas en la Costa del Sol
02 Julio 2025

En Málaga tiene su propio monumento y está a un paso de ser declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO. ¿Adivinas de qué hablamos? Exacto: del espeto de sardinas, un plato que se remonta al siglo XIX y que sigue conquistando paladares hoy en día. Si quieres saber dónde probar los mejores espetos de la Costa del Sol, aquí tienes algunas pistas.

Dónde comer en Málaga capital

Los espetos pueden degustarse tanto en chiringuitos como en restaurantes, y son la esencia misma de la cocina malagueña. En los chiringuitos de El Palo y Pedregalejo, en la ciudad de Málaga, se preparan algunos de los mejores espetos de toda la provincia. Aunque la carta de estos locales suele incluir otros platos imprescindibles como el célebre pescaíto frito, los calamares, las jibias, los calamaritos y los boquerones son solo algunas de las delicias que podrás saborear frente al mar.

Espetos en la Costa del Sol oriental

Con la llegada del buen tiempo, en los municipios de la Costa del Sol oriental es habitual ver las tradicionales barcas cargadas de leña listas para espetar sardinas. Una de las zonas más reconocidas es Torre del Mar, en el municipio de Vélez-Málaga, donde podrás disfrutar de espetos y muchas otras especialidades locales en sus chiringuitos a pie de playa. Nerja, Rincón de la Victoria y Torrox son también destinos donde el espeto es una auténtica seña de identidad y un reclamo turístico imprescindible.

‘Pescaíto’ frito en la Costa del Sol occidental

Nada como una buena ración de sardinas asadas al calor de la leña para sumergirte en un mundo de sabores únicos. En localidades como Benalmádena, Fuengirola, Marbella o Torremolinos, los chiringuitos presumen de preparar algunos de los mejores espetos malagueños. En La Carihuela, una de las zonas más populares de Torremolinos, ningún chiringuito que se precie deja de incluir este plato en su carta. Degustar unas sardinas escuchando las olas del Mediterráneo es un placer que, sin duda, te hará desear que tus vacaciones en la Costa del Sol no terminen nunca.

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