DEBATE. La medida del Gobierno fue discutida en el recinto.
Las reacciones a la suspensión de clases presenciales de esta semana tuvieron su lugar en la sesión parlamentaria del Concejo Deliberante. Envueltos en chicanas políticas, los ediles se cruzaron por la medida dispuesta por el Gobierno provincial considerándola, por un lado, “acertada”, y por el otro, “improvisada”.
Quien introdujo el tema en el recinto fue el concejal José María Canelada. El radical rechazó la postura de La Libertad Avanza (LLA) Tucumán sobre que las jornadas escolares del lunes y del martes debían darse igual, pero además lanzó un reparo al gobierno de Osvaldo Jaldo, remarcando que “la desidia de quienes gobiernan hace que las instituciones estén en condiciones paupérrimas”. En este sentido, el ex legislador recordó que en 2021 el entonces ministro de Educación, Juan Pablo Lichtmajer, fue interpelado en la Cámara y se le cuestionó la infraestructura de las instituciones. “Después de eso debía venir la inversión y la responsabilidad con la comunidad educativa, pero las cosas no cambiaron”, cuestionó.
Leandro Argañaraz (Unión Cívica Radical) apuntó a priorizar el futuro académico de los estudiantes. “Tenemos que defender la educación y el futuro de estos niños. Espero que haya una decisión seria sobre este asunto en el la que los tucumanos no se puedan dar el lujo de faltar a clases porque sí. Necesitamos garantizar sus trayectorias académicas”, aseveró. Y comentó que presentó un proyecto para que se establezcan criterios de acción en las escuelas municipales ante casos de emergencia.
“Avenida del medio”
En tanto, Gastón Gómez (Libres del Sur) reaccionó en defensa de la “medida humanitaria y acertada” de Jaldo y cruzó a los radicales. “Con asombro escucho a representantes de una fuerza política que supo ser pionera en la defensa irrestricta de la educación pública. Entiendo el fervor electoral, pero no podemos ser neutrales con un Gobierno nacional que sin miramientos sigue aplicando motosierra. (Los concejales) tratan de ubicarse en una suerte de avenida del medio y bastardearnos al decir que los males que sufre nuestra patria es producto de estas políticas. Miren qué ironía”, soltó.
En defensa del ataque al partido centenario, Federico Romano Norri agregó: “era la responsabilidad del gobernador (atender las necesidades edilicias). Yo no puedo pensar como los libertarios que quieren un país para el 20%, el mismo país que apoya el gobernador de él (señalando a Gómez). Además, Libres del Sur en algún momento estuvo con la UCR en un armado donde los peronistas eran los malos; ahora, como son empleados, ya son buenos. Si Jaldo se pone de rodillas con (Javier) Milei, que le pide los tres votos para que acompañe y después no hay plata, no me vengan a decir que ha bajado el 25% de la coparticipación”.
Allí fue cuando se sumó el concejal Carlos Ale (PJS), del partido que hoy integra el Frente Tucumán Primero junto al gobernador. “Los que se ponen en posición de opositores solo por serlo, les pido que lo revean, porque el partido no va a ningún lado así. Hagamos lo que nos corresponde desde acá; tenemos una comisión de Educación (que preside Argañaraz) que hace mucho no se reúne a tratar proyectos: entonces, nos pongamos a trabajar desde nuestro lugar para aportar a la educación”, lanzó.
Por último, los peronistas Emiliano Vargas Aignasse y José María Franco plantearon sus consideraciones. El primero apuntó que la ola polar es producto del cambio climático, y puso como ejemplo el calor extremo que se sufre en Europa. También remarcó que “se ponen nerviosos algunos concejales de partidos que transitan por la avenida del medio, que les hace sentir ese escozor y miedo de dejar de existir políticamente, pero tenemos que terminar con esa hipocresía”. En tanto, Franco sostuvo: “acá no solamente tenemos que rever lo que parte de un oportunismo político sino tomar conciencia de que nosotros somos representantes del pueblo y debemos analizar situaciones de acuerdo a cómo se dan, tener en cuenta el pasado y no cometer los mismos errores hacia el futuro”.
Proyectos aprobados y otros detalles
La sesión parlamentaria de ayer en el Concejo Deliberante fue extensa y trató iniciativas de diferentes matices. Para el tratamiento del primer orden del día, los concejales recibieron a miembros de la Universidad Nacional de Tucumán (UNT) que impulsaron el programa “Volver a casa: la restitución de la indumentaria para una reparación histórica y la construcción de memoria colectiva”, declarado de interés municipal por unanimidad. Los mencionados trabajan por la recuperación y restitución a familiares de desaparecidos las prendas que sean identificadas en el Pozo de Vargas, centro clandestino de la última dictadura militar. Además, se aprobó la creación de un Instituto de Planeamiento Urbano, presentado como un ente autárquico municipal que investigue y proyecte un plan integral de urbanismo; y un proyecto sobre garantizar la desconexión digital para los docentes municipales fuera de su jornada laboral. Para sumar datos sobre la cita parlamentaria, se observó que el subsecretario de Gobierno de la Municipalidad capitalina, Alejandro Sangenis, estuvo presente en gran parte de la sesión; y que el radical Federico Romano Norri ocupó la banca de Alfredo Terán (Fuerza Republicana), quien se ausentó por cuestiones personales.
Llamado de atención para un radical
El tratamiento del período de regularización administrativa para el Sutrappa acabó con un reproche institucional de parte del presidente del cuerpo, Fernando Juri, hacia Federico Romano Norri. Sucede que, luego de que el concejal Leandro Argañaraz adelantara su voto en contra por considerar que ya se han permitido demasiadas excepciones, el radical defendió su apoyo al dictamen de la comisión de Transporte diciendo que “a mí la vida me ha enseñado que hay que hacer lo que se debe y defender los intereses de lo que hoy establece el marco normativo: quien funciona en San Miguel de Tucumán de manera legal y vigente hace muchísimos años es el taxi a quien, perdón la vulgaridad, le hemos cagado la vida”. A su vez, apuntó a la “demagogia” de algunos concejales que “salieron de manera irresponsable a fomentar el uso de las aplicaciones digitales”. Tras su alocución, Juri intervino: “le voy a pedir que más allá de lo que pueda opinar, a favor o en contra, cuide el lenguaje”, solicitó. Argañaraz volvió a pedir la palabra y lanzó: “hace falta tener mesura, porque no estamos hablando del servicio sino de esta excepción administrativa. Aún así se me quiere arengar que soy un irresponsable y que estoy en contra, cuando nada que ver”. Asimismo, el alfarista Carlos Ale, que integra la comisión de Transporte, defendió el trabajo del comité, apuntando que “es muy fácil hablar sobre los temas, pedir celeridades y que ‘se saquen’ las ordenanzas. Pero son temas que nos corresponde analizar, donde tocamos intereses y buscamos lo mejor para la ciudad”. Por último, el radical José María Canelada declaró que los ediles deberían manejarse dentro del marco del respeto porque “hay que ser muy prudentes con la calificación o descalificación de quien disiente con mi postura, porque la descalificación impide el debate de fondo”.























