LA GACETA / FOTO DE ANALÍA JARAMILLO
La provincia comenzará a capacitar contra los discursos de odio y el antisemitismo a partir de un convenio que se firmó entre la Secretaría de Gobierno y Relaciones Institucionales que conduce Raúl Albarracín, y el Centro Simón Wiesenthal, representado por su director para Latinoamérica, Ariel Gelblung.
Durante la firma del convenio estuvieron además Hugo Navas, coordinador general de la Escuela de Gobierno de la Provincia, Salomón Nussbaum, Rabino de la Kehila, Fabián Neiman, presidente de la DAIA Tucumán, con la participación del vocal de la Corte Suprema de Justicia Daniel Posse.
En diálogo con LA GACETA, Albarracín indicó que el convenio implica “la generación de proyectos formativos, de tener oportunidades para ir formando las conciencias de nuestros comprovincianos, en el sentido de que la sociedad que debemos construir es justamente una sociedad en donde el respeto, la tolerancia y la inclusión estén plenamente vigentes. Y para eso, obviamente, el trabajo que se debe llevar adelante es a través de las herramientas educativas, de las herramientas formativas”, indicó. Aseguró que lo que se pretende es “una sociedad inclusiva donde la tolerancia y el respeto sean valores que imperen y estén totalmente vigentes. Tucumán tiene su ordenamiento normativo, jurídico, normas que combaten el antisemitismo y es una tierra en donde podemos apreciar y ver cómo hay una convivencia armónica entre las distintas expresiones, cualquiera sea su origen o diversidad y es fundamental que mantengamos siempre vigentes esos valores que históricamente y culturalmente caracterizan a Tucumán y que obviamente debemos seguir construyendo para el presente y desde el presente para el futuro”, remarcó.
El peor momento
Según Gelblung, “estamos en el peor momento de antisemitismo en el mundo después del fin de la Segunda Guerra Mundial. El conflicto en Medio Oriente, del que no nos referimos en este caso, ha puesto en real peligro a las comunidades judías que viven en cada uno de los lugares. La no separación de determinadas cosas y haber permitido que se caigan determinadas caretas poniéndose en algunos lugares del lado del terrorismo es realmente peligroso”. Al respecto, Gelblung indicó que “se tomen palabras como si fuesen insultos. Sionismo no es una mala palabra. Sionismo es el movimiento de autodeterminación nacional del pueblo judío en su tierra ancestral. Y alguien no puede venir y sostener: ‘yo estoy de acuerdo con la autodeterminación de todos los pueblos del mundo menos uno’. Eso es realmente una discriminación. Entonces uno no puede decir yo no soy antisemita, soy antisionista. Es una falacia”.
Al ser consultado sobre cómo se lucha contra el antisemitismo, aseguró que primero “hay que entender que en algunos casos mucha gente llega a estas situaciones por ignorancia. La ignorancia con saber se acaba. Entonces una de las posibilidades es capacitar, es venir y explicar y que alguien pueda entender lo que está sucediendo. Poder abrirse, que vean que no hay absolutamente ninguna cuestión rara, sino que puedan aprender”. “Ahora, si alguien no quiere aprender y vos tenés las explicaciones claras bueno, vos tenés las leyes y las leyes están para hacerse cumplir cuando la convivencia no puede estar establecida de otra manera. Entonces la ley antidiscriminatoria tiene que ser aplicada. Discriminar es un delito en la Argentina. No puede ser gratis discriminar”. En ese sentido destacó: “hay una decisión de los legisladores de ponerle un límite al discurso, y es así porque la ley lo prevé y porque la nación lo decidió así”.
Visita a LA GACETA y expresión de desagravio por el ataque de hackers a nuestro diario
Ariel Gelblung, autor del libro “Antisemitismo” y Director del Centro Simón Wiesenthal, realizó una visita a LA GACETA, acompañado por Raúl Albarracín, Secretario de Gobierno y Relaciones Institucionales; Katherina Mazzuco, Subsecretaria de Gobierno; Hugo Navas, Coordinador General de la Escuela de Gobierno de la Provincia; el rabino Salomón Nussbaum; Sebastián Kohn, presidente de la Kehilá, y Fabián Neiman, presidente de DAIA, entre otros. Fueron recibidos por el jefe de Redacción, secretario general Federico van Mameren, y por el secretario Roberto Delgado y el editor Juan Manuel Montero. Se habló en extenso sobre disciminación, discursos de odio y libertad de expresión, y los visitantes hicieron una expresión de desagravio a LA GACETA por el ataque que hackers de un seudogrupo neonazi “Tacuara” efectuaron contra el sitio web del diario el 5 de julio.























