Recurrir a su espacio es para que seamos escuchados en reclamos que nos preocupan como sociedad, y porque seguramente algún canal pertinente pueda hacerse eco de las voces que nunca se escuchan. En la comunidad de Río Seco preocupa profundamente el destrato como habitantes de un pueblo que creció enormemente en su número. Y es un destrato porque cómo no habrá alguien que ordene el tránsito vehicular, la falta de riego por las calles del pueblo, y la lluvia de desechos tóxicos a la que somos sometidos por años por parte de la empresa azucarera radicada en la localidad, ingenio La Providencia. Cada día patios, ropa y nuestra propia respiración somos inundados por esas partículas a veces blanquecinas, otras negras, ¿y a quien le importa el perecer de todo un pueblo, dónde hasta la propia salud está en juego? Y hablamos del tránsito vehicular y es tremendo como los comerciantes llenan de pizarras y carteles frente de sus negocios y dificultan gravemente la visualización de peatones, ciclista o los vehículos que ya no tienen ningún tipo de seguridad por el atropello generalizado. Como tierra de nadie. Están pavimentando, según el poder del pueblo es la Comuna quien lo hace y vemos propagandas que el Gobierno provincial lo está haciendo en la provincia. Pero al margen de esa versión... ¿por qué no tomaron recaudos para que sea ordenado el desvío que ese trabajo implica? Paradójico con el verso de moda en el lugar porque no somos todos…
Paula Isabel Arévalo
Alberdi 76 - Río Seco





















