La tercera fecha del Torneo Clausura 2025 será recordada por un motivo poco feliz: rompió un récord negativo que llevaba más de un siglo vigente. Por primera vez en 134 años de fútbol argentino, ocho partidos de una misma jornada de Primera División terminaron 0-0. Nunca antes hubo tanta sequía en tan poco tiempo.
El dato se cerró este domingo con dos nuevos empates sin goles: Talleres-Godoy Cruz en Córdoba y el clásico entre River y San Lorenzo en el Monumental. Con esos resultados, ya son ocho los encuentros sin festejos sobre un total de 12 partidos disputados hasta ahora. La cifra podría aumentar, ya que todavía quedan tres compromisos por jugarse este lunes, entre ellos, el duelo entre Riestra y Atlético Tucumán.
Más allá del dato frío, lo que preocupa es el contexto: apenas se convirtieron cinco goles en toda la jornada, lo que marca un promedio de 0,41 por partido y tira hacia abajo el del campeonato, que cayó a 1,61. En otras palabras, estamos viendo uno de los torneos más apagados de los últimos tiempos.
Lo más llamativo es que este récord se alcanzó en una fecha con pocos partidos: que el 66% haya terminado sin goles es una señal de alarma para un fútbol que, supuestamente, atraviesa una etapa profesionalizada, con mejores condiciones y más recursos que nunca. Ni siquiera los cinco grandes pudieron romper la racha: Boca, River, San Lorenzo, Racing e Independiente se fueron en blanco, algo que solo había ocurrido una vez, en 1962.
Todos los 0-0 de la fecha 3:
- Independiente Rivadavia 0-0 Belgrano
- Unión 0-0 Tigre
- Aldosivi 0-0 Newell's
- Rosario Central 0-0 San Martín (SJ)
- Platense 0-0 Argentinos Juniors
- Vélez 0-0 Instituto
- Talleres 0-0 Godoy Cruz
- River 0-0 San Lorenzo
Hasta ahora, el récord de empates sin goles en una sola jornada era de seis, algo que había sucedido en cinco ocasiones, la primera en el Apertura 1993 y la última en la Copa de la Liga 2023. Esta vez, el Clausura 2025 fue más allá.
La pregunta ahora es si los partidos que restan por jugar seguirán esta tendencia o ayudarán a maquillar una fecha que, por el momento, quedó marcada como la más gris en más de un siglo de historia.





















