Ciclovías, transporte público y menos autos: la propuesta para transformar la movilidad urbana en Tucumán

La tesis de Facundo Humaran , un tucumano de 33 años, generó interés entre docentes y especialistas de la Universidad de Barcelona, donde cursó un máster en Políticas Públicas, Derechos Sociales y Sostenibilidad. Su investigación, centrada en la movilidad urbana de San Miguel de Tucumán, abordó problemáticas como la falta de infraestructura para la micromovilidad, la prioridad del peatón y las características del transporte público local.

En el trabajo, Humaran propuso aplicar en Tucumán políticas que alienten el uso de bicicletas y desincentiven el estacionamiento en las calles del centro. “En Barcelona, y como ocurre en otras ciudades del mundo, la idea es desalentar el uso de vehículos particulares en el centro y dar más lugar a peatones y a estos medios de transportes personales. Aplicar políticas de este tipo ayudarán al medio ambiente, disminuyen la contaminación sonora y reducen tiempo en movilidad de las personas”, sostuvo.

El joven comparó la situación de ambas ciudades en materia de micromovilidad. Mientras que en Barcelona crece el uso de bicicletas y monopatines, en Tucumán aún no se han implementado políticas que desarrollen una red de bicisendas. En ese marco, Humaran propuso una prueba piloto de ciclovías y un sistema de bicicletas compartidas dentro del perímetro de las cuatro avenidas principales de la capital tucumana. “Hice una encuesta con personas que viven en Barrio Norte y trabajan en Barrio Sur, por ejemplo, en Tribunales. Hay una distancia que vos decís, ‘es cerca, pero no puedo ir caminando a las 7 de la mañana’. Entonces esto fomenta a que se use el auto propio y eso aumenta el tráfico en horas pico”, explicó. Por esto, su propuesta contempla ciclovías distribuidas de norte a sur y de este a oeste, con 15 estaciones estratégicas para dejar las bicicletas. Las calles elegidas para trazar las bicisendas, de norte a sur, son: Monteagudo/Entre Ríos, Laprida/Congreso, Muñecas/Buenos Aires, Junín/Ayacucho, Catamarca/La Rioja y Marco Avellaneda/Bernabé Aráoz. En sentido este-oeste, se propuso instalarlas en Marcos Paz, Santiago del Estero, Córdoba, San Martín, Crisóstomo Álvarez, Piedras, La Madrid y Bolívar.

Otro punto abordado fue el ordenamiento del estacionamiento. El tesista señaló que en Barcelona la implementación de bicisendas estuvo acompañada por el estacionamiento medido, una política que en Tucumán fue anulada por la Justicia. “Al tener que pagar, la gente deja de buscar estacionamiento en las calles. Las calles no son para poner autos, sino para transitar. En Barcelona, mis profesores se sorprendieron cuando mostré fotos y videos de vehículos estacionados hasta en doble fila. Modificando esto, habrá espacio para poner las bicisendas”, remarcó.

En cuanto al sistema de colectivos, Humaran contrastó la realidad de ambas ciudades. Mientras en Barcelona el transporte público es utilizado por todas las clases sociales, en Tucumán aún persisten numerosas falencias. Sin embargo, el joven se mostró optimista respecto a una posible mejora.

Carriles exclusivos

Destacó, por ejemplo, la implementación de carriles exclusivos para buses por parte de la actual gestión municipal. “En España, existen estos carriles pero los comparten colectivos y taxis. Esto también alentó el uso de taxis porque en definitiva circulan más rápido que un auto particular”, señaló.

También subrayó la incorporación progresiva de vehículos eléctricos en Barcelona, tanto bicicletas como colectivos. “La tecnología está avanzando y en Argentina ya se puede ver, por ejemplo con los buses eléctricos de CABA. Otro punto que resalté y generó debate en la universidad es que el transporte público tiene prioridad, por lo que sacar los ómnibus del centro tucumano no fue visto como una buena medida”, explicó. Para Humaran, las políticas públicas exitosas deben priorizar el orden de circulación urbana: primero los peatones, luego el transporte público, y en último lugar los autos particulares.

Finalmente, el joven analizó el conflicto entre las aplicaciones de transporte y el servicio público de pasajeros en Tucumán, un tema que también fue debatido durante su defensa de tesis. “El ciudadano tiene la libertad de elegir el medio que le resulte más cómodo. Pero eso no tan sólo ocurre en Barcelona, en Buenos Aires no hay problemas de ese tipo y es porque todos los servicios que se ofrecen son de buena calidad. En Tucumán, una persona prefiere tomar un auto particular en verano porque dentro del colectivo hacen 60 grados”, apuntó.

Con su investigación, Facundo Humaran busca aportar ideas concretas para repensar la movilidad en la capital provincial, inspirándose en modelos internacionales pero con foco en la realidad local.