El ex jefe máximo de la Fórmula 1, Bernie Ecclestone, volvió a ser noticia tras decidir desprenderse de una parte importante de su fortuna. Con 95 años, contó que comenzó a vender sus yates y confirmó que ya no posee su famosa colección de autos de lujo, valuada en una cifra millonaria. La decisión sorprendió al ambiente del automovilismo, ya que durante décadas construyó una imagen ligada al lujo extremo.
Actualmente, Ecclestone reside en Gstaad, Suiza, con su esposa Fabiana y su hijo Ace. En una charla con el medio alemán Bild, explicó que tomó este rumbo para reducir las responsabilidades que implican sus bienes. Contó que uno de sus yates ya cambió de dueño, y su pareja añadió que apenas lo utilizaban algunos días al año, por lo que mantenerlo no tenía sentido.
El barco vendido se llama “Petara”, combinación de los nombres de sus hijas Petra y Tamara, fruto de su matrimonio anterior con Slavica Radic. Además, confirmó que otro yate más pequeño, que estaba amarrado en Ibiza, también está disponible para quien quiera comprarlo. Según el medio alemán, el empresario está llevando adelante una etapa de “limpieza patrimonial”.
En cuanto a su colección de autos, Ecclestone ya la había entregado a comienzos de este año. Se trataba de 69 superdeportivos, vendidos al copropietario de Red Bull, Mark Mateschitz, hijo del fallecido Dietrich Mateschitz. La valuación llegaba a los 660 millones de dólares e incluía piezas históricas como autos de Ferrari conducidos por Niki Lauda y Michael Schumacher, y Brabhams de Nelson Piquet. El propio Ecclestone comentó que lo más importante para él era asegurarse de que las unidades quedaran en un lugar donde pudieran ser apreciadas. Dijo que sabía que serían exhibidos para los fanáticos y que eso lo dejaba satisfecho.
Su vínculo con la Fórmula 1 permanece intacto
La entrevista coincidió con su cumpleaños número 95. A pesar de la edad, afirmó que su pasión sigue intacta. Sostuvo que continúa mirando cada carrera e incluso se acomoda a los horarios internacionales para no perderse las competencias. Durante más de cuarenta años, Ecclestone fue el gran arquitecto que consolidó a la Fórmula 1 como un fenómeno global, y su vínculo emocional con la categoría permanece tan fuerte como siempre.





















