¿Cuál es el mejor momento para apagar el WiFi? Mitos, recomendaciones y cuándo conviene hacerlo

En materia de consumo, los routers actuales operan con una eficiencia muy alta, por lo que la diferencia en la factura de luz es prácticamente imperceptible.

WiFi WiFi
23 Noviembre 2025

La costumbre de apagar el router WiFi por las noches o en períodos en los que nadie lo utiliza se volvió habitual en muchos hogares. Quienes adoptan este hábito suelen hacerlo con motivos que consideran razonables: reducir el consumo eléctrico, evitar una supuesta exposición a radiación electromagnética y reforzar la seguridad de la red o la vida útil del equipo. Sin embargo, el impacto real de estas prácticas suele ser mucho menor de lo imaginado.

En materia de consumo, los routers actuales operan con una eficiencia muy alta, por lo que la diferencia en la factura de luz es prácticamente imperceptible. Algo similar sucede con las preocupaciones vinculadas a la radiación: la potencia de emisión es baja, está regulada y la evidencia científica disponible no señala riesgos relevantes para la salud en condiciones normales de uso.

Tampoco resulta beneficioso apagar y encender el equipo de manera frecuente. Este hábito puede interrumpir actualizaciones de firmware que mejoran la seguridad y el rendimiento del router, y además prolonga el tiempo que la conexión tarda en restablecerse. A eso se suma que los ciclos repetidos de encendido generan un esfuerzo innecesario en los componentes internos, lo que podría acortar ligeramente su vida útil.

En la mayoría de los casos, mantener el router encendido de manera permanente ofrece mayor estabilidad y comodidad.

Cuándo conviene apagar el WiFi (y por qué no hacerlo cada noche)

Apagar el WiFi como rutina nocturna no es una práctica recomendable para la mayoría de los usuarios. Aunque la intención sea ahorrar energía o evitar riesgos para la salud, el gasto eléctrico de un router es mínimo -incluso menor que el de una lámpara LED-, por lo que el ahorro económico prácticamente no se nota. Mantenerlo encendido, además, garantiza que la red esté disponible para dispositivos inteligentes, sistemas de seguridad y servicios que requieren conexión continua.

Uno de los principales motivos para evitar los apagados nocturnos es preservar la estabilidad de la conexión. Los proveedores suelen enviar actualizaciones de firmware y ajustes de red durante la noche; si el equipo está apagado, esos optimizadores no se aplican. Encendidos y apagados constantes también pueden generar interpretaciones erróneas en la red del proveedor, que podría considerar la línea inestable y, en consecuencia, reducir la velocidad asignada.

Mantener el router activo permite, además, que complete tareas de mantenimiento. Los fabricantes publican parches de seguridad frente a vulnerabilidades, y el dispositivo necesita estar encendido para descargarlos e instalarlos. Si se interrumpe este proceso con apagados frecuentes, la red puede quedar expuesta de manera innecesaria.

Los casos en los que sí es útil apagar el router

Aunque no convenga apagarlo todos los días, existen situaciones en las que sí se justifica desconectar el equipo:

- Para resolver fallas de conexión

Un reinicio rápido -apagarlo unos segundos y volver a encenderlo- suele corregir problemas de lentitud o desconexiones, ya que limpia la memoria interna y restablece la comunicación con el proveedor.

- Durante tormentas eléctricas

Frente a una fuerte tormenta, desenchufar el router es la opción más segura. Una subida de tensión puede dañarlo de manera irreversible.

- Si la vivienda quedará vacía por un tiempo prolongado

Cuando el hogar permanecerá deshabitado durante semanas o meses, apagar el equipo reduce el riesgo de fallas eléctricas no supervisadas.

Temas Digital
Tamaño texto
Comentarios
Comentarios