03 Marzo 2006
RECLAMO BAJO EL AGUA. Los amigos de Paulina piden que se intensifiquen las averiguaciones para hallar pronto a su compañera. LA GACETA / JUAN PABLO SANCHEZ NOLI
"¡Paulina, dónde está!¡Paulina, dónde está!", exclamaron frente a la Casa de Gobierno cerca de 70 jóvenes, alumnos de la facultad de Filosofía y Letras, que marcharon ayer bajo la lluvia. Los estudiantes aseguraron que continuarán movilizándose hasta que aparezca su compañera Paulina Alejandra Lebbos, de 24 años, que está desaparecida desde el domingo.
Los compañeros y amigos de la joven coincidieron en que Paulina sería incapaz de abandonar a su familia. "Es una chica sencilla, divertida y muy amiguera. Estamos muy preocupados por ella; no sabemos qué puede haberle pasado. Su hijita es su devoción, ella jamás la dejaría", comentó Doris Linares. La estudiante sostuvo que decidieron movilizarse para demostrar su solidaridad con la familia Lebbos y para exigir más seguridad al Gobierno.
Cesar Soto, novio de la joven, con quien tienen una hija de cinco años, participó de la marcha y dijo estar molesto con las declaraciones del padre de Paulina, Alberto Luis Lebbos.
"El no tenía por qué dar a conocer el nombre de mi hija. Me molesta que le brinde tanta información a la prensa", exclamó en un breve discurso que emitió en la plaza Independencia, pese a que el principal organizador de la marcha les ordenó a él y a los amigos de la víctima que no dieran ninguna información a los medios.
Buenos momentos
Paula Pavón, compañera y amiga de Paulina, comentó que a la joven le encantaba pasar buenos momentos con sus amigos. "Habíamos ido a bailar el fin de semana anterior y también iba a ir con Paulina el sábado pasado, para festejar que ella había aprobado la materia de Publicidad, pero a último momento desistí. No sé con quiénes estuvo en el boliche", comentó la joven a LA GACETA. "Lo que le sucedió a mi amiga podría haberle pasado a cualquiera de nosotros, cuando uno sube a un remise no tiene manera de saber si es legal o no", agregó.
A metros de la facultad, sobre la avenida Benjamín Aráoz, una camioneta Ford Explorer negra arremetió entre los manifestantes que ocupaban la calle. El vehículo no se detuvo, aunque los jóvenes y la Policía se abalanzaron sobre el rodado para impedir su paso.
Gustavo Sáenz, compañero de la víctima, informó que hoy y mañana repartirán volantes con la foto de Paulina. "Nuestro trabajo es hacerle saber a la sociedad que nuestra amiga está perdida, no pararemos hasta encontrarla. En ningún momento pretendemos presionar al Gobierno", sostuvo.
Los compañeros y amigos de la joven coincidieron en que Paulina sería incapaz de abandonar a su familia. "Es una chica sencilla, divertida y muy amiguera. Estamos muy preocupados por ella; no sabemos qué puede haberle pasado. Su hijita es su devoción, ella jamás la dejaría", comentó Doris Linares. La estudiante sostuvo que decidieron movilizarse para demostrar su solidaridad con la familia Lebbos y para exigir más seguridad al Gobierno.
Cesar Soto, novio de la joven, con quien tienen una hija de cinco años, participó de la marcha y dijo estar molesto con las declaraciones del padre de Paulina, Alberto Luis Lebbos.
"El no tenía por qué dar a conocer el nombre de mi hija. Me molesta que le brinde tanta información a la prensa", exclamó en un breve discurso que emitió en la plaza Independencia, pese a que el principal organizador de la marcha les ordenó a él y a los amigos de la víctima que no dieran ninguna información a los medios.
Buenos momentos
Paula Pavón, compañera y amiga de Paulina, comentó que a la joven le encantaba pasar buenos momentos con sus amigos. "Habíamos ido a bailar el fin de semana anterior y también iba a ir con Paulina el sábado pasado, para festejar que ella había aprobado la materia de Publicidad, pero a último momento desistí. No sé con quiénes estuvo en el boliche", comentó la joven a LA GACETA. "Lo que le sucedió a mi amiga podría haberle pasado a cualquiera de nosotros, cuando uno sube a un remise no tiene manera de saber si es legal o no", agregó.
A metros de la facultad, sobre la avenida Benjamín Aráoz, una camioneta Ford Explorer negra arremetió entre los manifestantes que ocupaban la calle. El vehículo no se detuvo, aunque los jóvenes y la Policía se abalanzaron sobre el rodado para impedir su paso.
Gustavo Sáenz, compañero de la víctima, informó que hoy y mañana repartirán volantes con la foto de Paulina. "Nuestro trabajo es hacerle saber a la sociedad que nuestra amiga está perdida, no pararemos hasta encontrarla. En ningún momento pretendemos presionar al Gobierno", sostuvo.