Por Carlos Páez de la Torre H
14 Septiembre 2011
En 1935, cuando ya había establecido su residencia en Buenos Aires, el doctor Juan B. Terán (1880-1938) aceptó la candidatura a senador nacional por la Capital, que le ofreció la Concordancia (Partido Demócrata Nacional, Partido Socialista Independiente y UCR Antipersonalista).
Las perspectivas de triunfo eran muy escasas. Faltaba apenas un mes para la elección, la Concordancia se había rearmado precipitadamente, y se sabía que la UCR personalista, abstenida como tal, votaría por el Partido Socialista, cuyo candidato -a reelección- era el muy popular doctor Alfredo L. Palacios. Pero Terán aceptó, porque postulaba "un programa nuevo de acción política, que prescinda de colores partidarios y busque una unión nacional", como declaró entonces.
En su proclamación (14 de marzo), en el Coliseo, Terán dijo que su candidatura "quiere ser una palabra serena pronunciada más arriba de los partidos y dirigida a la nación entera". Al aceptarla, no se preguntó por la perspectiva de una victoria. La tomó como un deber, que le permitía "pronunciar palabras de verdad", lo que era "grata perspectiva para mi vocación de hablar, siempre desde la sombra, de ideales que no excluyen a ninguno de mis conciudadanos".
Terán resultó perdidoso en la elección, que era del sistema indirecto. Logró 21 electores, mientras Palacios arrasó con 46. En un reportaje posterior de "Caras y Caretas", Palacios dijo que Terán era "un hombre eminente". Agregó: "creo, con toda lealtad, que merecía más votos, porque es un hombre de bien, y en caso de haber triunfado habría sido un eximio senador".
Las perspectivas de triunfo eran muy escasas. Faltaba apenas un mes para la elección, la Concordancia se había rearmado precipitadamente, y se sabía que la UCR personalista, abstenida como tal, votaría por el Partido Socialista, cuyo candidato -a reelección- era el muy popular doctor Alfredo L. Palacios. Pero Terán aceptó, porque postulaba "un programa nuevo de acción política, que prescinda de colores partidarios y busque una unión nacional", como declaró entonces.
En su proclamación (14 de marzo), en el Coliseo, Terán dijo que su candidatura "quiere ser una palabra serena pronunciada más arriba de los partidos y dirigida a la nación entera". Al aceptarla, no se preguntó por la perspectiva de una victoria. La tomó como un deber, que le permitía "pronunciar palabras de verdad", lo que era "grata perspectiva para mi vocación de hablar, siempre desde la sombra, de ideales que no excluyen a ninguno de mis conciudadanos".
Terán resultó perdidoso en la elección, que era del sistema indirecto. Logró 21 electores, mientras Palacios arrasó con 46. En un reportaje posterior de "Caras y Caretas", Palacios dijo que Terán era "un hombre eminente". Agregó: "creo, con toda lealtad, que merecía más votos, porque es un hombre de bien, y en caso de haber triunfado habría sido un eximio senador".





















