La lluvia culpable del sabor a incompleto

La intervenida YPF será reestatizada, pero pasará un buen tiempo hasta que el país logre el autoabastecimiento de combustible. Soñando por cantar con tonada tucumana emocionó a multitudes, pero los masivos $ 400.000 que le costaron al Estado no tuvieron control preventivo del Tribunal de Cuentas. La vieja escuela de Los Romano se hunde, pero la nueva no termina de levantarse: los chicos toman clases en un club sin paredes y con piso de barro. Los pesos argentinos son moneda nacional, pero los imprime la privada ex Ciccone. Messi pateó un penal, pero no fue gol. Los ediles de la democracia pavimentadora dijeron -y votaron- que era bueno asfaltar los pulmones de manzana, pero no era tan bueno y darán marcha atrás. Es tiempo de zafra, pero su inicio se demorará por la lluvia. Porque la lluvia, y sólo ella, tiene la culpa de esta realidad sabor a incompleto. En definitiva, para guarecerse del agua, los tucumanos salieron ayer, pero de un adentro hacia otro adentro. Quede donde quede ese lugar donde va la gente (y la verdad pública) cuando llueve.

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