03 Noviembre 2012
La última gran cita del año tenístico comienza el lunes y allí estará Juan Martín Del Potro. El tandilense participará por tercera vez en las finales del ATP World Tour, más conocidas como Torneo de Maestros. Hasta allí llegó, como los otros siete jugadores, con la aspiración de ganar el título. Por naturaleza la cita, que reúne a los mejores del año, es tremendamente competitiva y más aun cuando, como en esta edición, de los ocho titulares, sólo desertó Rafael Nadal. Si se analizan las estadísticas de "Delpo" durante la temporada, el panorama es complicado. De las 15 derrotas que sufrió en 2012, 12 fueron contra jugadores ubicados entre los siete primeros puestos del ranking. Sí, esos siete lo esperan desde el lunes en Londres. Por eso, el camino que conduce a recibirse de maestro es, por lo menos, cuesta arriba para él.
Los números del tandilense son lógicos porque son proporcionales: el tenista de ranking superior derrotó a uno de inferior clasificación. Sin embargo, en siete ocasiones Del Potro rompió esa lógica en el año y es esa excepción la que deberá fortalecer durante la semana al campeón del US Open de 2009. También, según sus declaraciones y lo que mostró en los torneos de Viena (campeón), Basilea (campeón) y París (llegó a octavos de final), es positivo que las molestias que lo aquejaron durante el año (rodilla y muñeca izquierda) no se asomaron en estas últimas tres semanas. Más allá del buen nivel que mostró, esos siete partidos deberán ser los extras suficientes para que la fortaleza mental de "Delpo" funcione ante la estadística.
De las tres caídas ante jugadores de ranking inferior, dos se dieron en situaciones particulares. La primera fue en enero, que si bien fue ante Marcos Baghdatis, de ranking y hasta juego inferior, se puede considerar que al ser el primer torneo del año le costó encontrar el ritmo. La segunda se produjo luego de los Juegos Olímpicos donde ganó la medalla de bronce. Antes de perder ante el checo Radek Stepanek, Del Potro tuvo poco más de dos días para recuperarse del intenso partido que perdió ante Roger Federer y de la victoria ante Novak Djokovic. La reciente caída ante el francés Michael Llodra no tuvo atenuantes: no estuvo en buen nivel y su rival fue superior.
Los números del tandilense son lógicos porque son proporcionales: el tenista de ranking superior derrotó a uno de inferior clasificación. Sin embargo, en siete ocasiones Del Potro rompió esa lógica en el año y es esa excepción la que deberá fortalecer durante la semana al campeón del US Open de 2009. También, según sus declaraciones y lo que mostró en los torneos de Viena (campeón), Basilea (campeón) y París (llegó a octavos de final), es positivo que las molestias que lo aquejaron durante el año (rodilla y muñeca izquierda) no se asomaron en estas últimas tres semanas. Más allá del buen nivel que mostró, esos siete partidos deberán ser los extras suficientes para que la fortaleza mental de "Delpo" funcione ante la estadística.
De las tres caídas ante jugadores de ranking inferior, dos se dieron en situaciones particulares. La primera fue en enero, que si bien fue ante Marcos Baghdatis, de ranking y hasta juego inferior, se puede considerar que al ser el primer torneo del año le costó encontrar el ritmo. La segunda se produjo luego de los Juegos Olímpicos donde ganó la medalla de bronce. Antes de perder ante el checo Radek Stepanek, Del Potro tuvo poco más de dos días para recuperarse del intenso partido que perdió ante Roger Federer y de la victoria ante Novak Djokovic. La reciente caída ante el francés Michael Llodra no tuvo atenuantes: no estuvo en buen nivel y su rival fue superior.
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