20 Noviembre 2012
TODOS JUNTOS. Moyano, Micheli, Buzzi y Piumato, entre otros, brindaron una conferencia de prensa tras el paro. DYN.
BUENOS AIRES.- El líder de la CGT Azopardo, Hugo Moyano, afirmó esta tarde que se siente "enormemente satisfecho" por el acatamiento al paro nacional convocado por el sindicalismo opositor, y consideró que "el silencio de las calles que se dio hoy es la voz que el gobierno debe escuchar".
Durante una conferencia de prensa conjunta con Pablo Micheli de la CTA disidente y otros gremialistas, Moyano afirmó que "hoy sin duda es un día de fiesta" y "nos sentimos enormemente satisfechos porque sabemos que estamos cumpliendo con nuestro deber y obligación".
"Sin ninguna duda la jornada de hoy ha tenido una adhesión mucho más de lo que nosotros imaginábamos", al tiempo que destacó que la medida de fuerza "se ha expresado en el vacío en la Ciudad, en los establecimientos, en los reclamos en las rutas".
Moyano, además, calificó de "bocones y jetones" a funcionarios del Gobierno que habían criticado con dureza el paro nacional como el ministro del Interior Florencio Randazzo y el jefe de Gabinete Juan Manuel Abal Medina. "Hablan por hablar y que dicen que ahora nos van a denunciar por extorsión", señaló.
"La respuesta que debe dar el Gobierno no es para los dirigentes, sino para los trabajadores. El silencio con que se han expresado los trabajadores es para que de una vez por todas el Gobierno entienda que debe dar respuestas a los reclamos", agregó.
Posteriormente, los dirigentes Ricardo Cirielli (técnicos aeronáuticos) y Carlos Acuña (Estaciones de Servicio), reclamaron a la presidenta Cristina Fernández "dejar de lado la soberbia" y ratificaron su alianza con el moyanismo.
Acuña consideró que el paro de hoy puede ser "el principio" de una solución a sus reclamos o "puede ser el principio de un plan de lucha si no hay respuestas". A su turno, Cirielli aludió a la Presidenta al señalar que "siempre se está a tiempo de cambiar, sin ningunear a nadie", al tiempo que consideró que la mandataria "debe solucionar los problemas de toda la sociedad argentina, de aquellos que estuvieron el 8 de noviembre en la calle y hoy en el paro". (DyN-Télam)
Durante una conferencia de prensa conjunta con Pablo Micheli de la CTA disidente y otros gremialistas, Moyano afirmó que "hoy sin duda es un día de fiesta" y "nos sentimos enormemente satisfechos porque sabemos que estamos cumpliendo con nuestro deber y obligación".
"Sin ninguna duda la jornada de hoy ha tenido una adhesión mucho más de lo que nosotros imaginábamos", al tiempo que destacó que la medida de fuerza "se ha expresado en el vacío en la Ciudad, en los establecimientos, en los reclamos en las rutas".
Moyano, además, calificó de "bocones y jetones" a funcionarios del Gobierno que habían criticado con dureza el paro nacional como el ministro del Interior Florencio Randazzo y el jefe de Gabinete Juan Manuel Abal Medina. "Hablan por hablar y que dicen que ahora nos van a denunciar por extorsión", señaló.
"La respuesta que debe dar el Gobierno no es para los dirigentes, sino para los trabajadores. El silencio con que se han expresado los trabajadores es para que de una vez por todas el Gobierno entienda que debe dar respuestas a los reclamos", agregó.
Posteriormente, los dirigentes Ricardo Cirielli (técnicos aeronáuticos) y Carlos Acuña (Estaciones de Servicio), reclamaron a la presidenta Cristina Fernández "dejar de lado la soberbia" y ratificaron su alianza con el moyanismo.
Acuña consideró que el paro de hoy puede ser "el principio" de una solución a sus reclamos o "puede ser el principio de un plan de lucha si no hay respuestas". A su turno, Cirielli aludió a la Presidenta al señalar que "siempre se está a tiempo de cambiar, sin ningunear a nadie", al tiempo que consideró que la mandataria "debe solucionar los problemas de toda la sociedad argentina, de aquellos que estuvieron el 8 de noviembre en la calle y hoy en el paro". (DyN-Télam)
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