21 Noviembre 2012
GENIO. El volante "culé" desparramó al checo Marek Suchý antes de volver a pisar la pelota. FOTO TOMADA DE MUNDODEPORTIVO.COM
MOSCU, Rusia.- El volante de Barcelona Andrés Iniesta dio ayer otra clase de control de pelota y creatividad para jugar al fútbol. En Moscú todos habían ido a ver una victoria de Spartak, pero el arrollador andar del equipo de Lionel Messi y compañía lo hizo imposible. Sin embargo, los más de 60.000 espectadores que se llegaron hasta el estadio Olímpico de Luzhnikí, en Moscú, se llevaron un regalo del cerebro del "barça". Justo cuando se terminaba el primer tiempo, con el 3-0 sellado en el marcador, Iniesta recibió un pase de Cesc Fábregas y se fue con la pelota, y cuatro rivales, hasta el banderín del córner. Ahí, en una baldosa, el volante de 28 años pisó un par de veces y enganchó para dejar desparramados a los jugadores rusos. Fue la jugada del partido y aunque no tuvo relación con ninguno de los tres goles, hizo evidente el talento de Iniesta y la vehemencia con la que intentaron marcarlo. Un crack. LA GACETA ©
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