06 Enero 2013
CLIMA ENRARECIDO. El Parlamento brasileño vive momentos complejos. LA GACETA / ARCHIVO
BRASILIA.- La Policía Federal del Brasil investiga la presunta existencia de una red de espionaje ilegal de políticos y autoridades en Brasilia, informó ayer el diario O Estado de Sao Paulo. Las pesquisas comenzaron con documentos entregados por el diputado Miro Teixeira (del Partido Democrático Laborista, aliado al Gobierno), al ministro de Justicia, José Eduardo Cardozo, y a la fuerza policial, con transcripciones de conversaciones telefónicas y correos electrónicos intercambiados entre legisladores.
"Se creó en la capital del país, bajo los ojos de los poderes de la República, una sociedad anónima de delincuentes y violadores de datos personales, que los aprovechan para hacer chantajes y obtener ventajas. No hay ningún ciudadano, ni siquiera la Presidenta (Dilma Rousseff), que tenga absolutamente segura su privacidad, y eso es muy malo para la democracia", agregó.
En una de las transcripciones figura uno de los presuntos integrantes de la red de espionaje ofreciendo sus servicios y diciendo que puede obtener datos de cualquier persona, "incluso de Rousseff". Teixeira reclamó que se controle la venta de materiales y equipos de comunicación.
Ante la proliferación de denuncias de escuchas telefónicas ilegales, varios políticos han comenzado a tener sumo cuidado con su teléfono. Como ejemplo, el portal G1 cita el caso del ex presidente del Supremo Tribunal Federal de Justicia, Gilmar Mendes, quien prohibió a sus secretarias transferir llamadas de su teléfono de línea a su celular.
El secretario de Salud del Distrito Federal, Augusto Carvalho, manifestó su preocupación por la vulnerabilidad a la que "todo el mundo" está sujeto. "Mi recelo es sobre la manipulación de las frases que uno pueda haber dicho. Creo que se trata de un estado de total inseguridad", manifestó.
Sitio hackeado
La página oficial de la Secretaría de Agricultura de San Pablo fue hackeada en protesta contra la asunción como diputado federal del ex titular del gobernante Partido de los Trabajadores (PT), José Genoino, condenado a seis años y 11 meses de prisión por delitos de corrupción y pago de sobornos en el Parlamento, ocurridos durante el primer Gobierno de Luiz Inacio Lula da Silva.
"Esto demuestra cómo nuestro país es justo, democrático, y que nuestros gobernantes son altamente competentes. Además, usted ciudadano, debe estar altamente satisfecho con todo. Al final, no tenemos nada qué reclamar", señalaba con ironía el mensaje de los hackers autoidentificados como nbdu1nder, que aparecía cuando se intentaba ingresar a la página. Los activistas también afirmaban: "la única forma de revolución posible en nuestro país es la lucha armada; el tiempo pasa, los gobiernos cambian y continuamos siendo esclavos del sistema".
Genoino siempre proclamó su inocencia; asumió su mandato el miércoles en lugar de Carlinhos Almeida, nuevo alcalde de Sao José dos Campos. La Corte Suprema decidió que los parlamentarios condenados sean despojados de sus mandatos, medida que entrará en vigencia después de que sea publicada la sentencia definitiva. La resolución provocó una controversia entre los poderes Judicial y Legislativo, que se arroga la potestad exclusiva para retirarle la banca a un legislador. (Télam-DPA)
"Se creó en la capital del país, bajo los ojos de los poderes de la República, una sociedad anónima de delincuentes y violadores de datos personales, que los aprovechan para hacer chantajes y obtener ventajas. No hay ningún ciudadano, ni siquiera la Presidenta (Dilma Rousseff), que tenga absolutamente segura su privacidad, y eso es muy malo para la democracia", agregó.
En una de las transcripciones figura uno de los presuntos integrantes de la red de espionaje ofreciendo sus servicios y diciendo que puede obtener datos de cualquier persona, "incluso de Rousseff". Teixeira reclamó que se controle la venta de materiales y equipos de comunicación.
Ante la proliferación de denuncias de escuchas telefónicas ilegales, varios políticos han comenzado a tener sumo cuidado con su teléfono. Como ejemplo, el portal G1 cita el caso del ex presidente del Supremo Tribunal Federal de Justicia, Gilmar Mendes, quien prohibió a sus secretarias transferir llamadas de su teléfono de línea a su celular.
El secretario de Salud del Distrito Federal, Augusto Carvalho, manifestó su preocupación por la vulnerabilidad a la que "todo el mundo" está sujeto. "Mi recelo es sobre la manipulación de las frases que uno pueda haber dicho. Creo que se trata de un estado de total inseguridad", manifestó.
Sitio hackeado
La página oficial de la Secretaría de Agricultura de San Pablo fue hackeada en protesta contra la asunción como diputado federal del ex titular del gobernante Partido de los Trabajadores (PT), José Genoino, condenado a seis años y 11 meses de prisión por delitos de corrupción y pago de sobornos en el Parlamento, ocurridos durante el primer Gobierno de Luiz Inacio Lula da Silva.
"Esto demuestra cómo nuestro país es justo, democrático, y que nuestros gobernantes son altamente competentes. Además, usted ciudadano, debe estar altamente satisfecho con todo. Al final, no tenemos nada qué reclamar", señalaba con ironía el mensaje de los hackers autoidentificados como nbdu1nder, que aparecía cuando se intentaba ingresar a la página. Los activistas también afirmaban: "la única forma de revolución posible en nuestro país es la lucha armada; el tiempo pasa, los gobiernos cambian y continuamos siendo esclavos del sistema".
Genoino siempre proclamó su inocencia; asumió su mandato el miércoles en lugar de Carlinhos Almeida, nuevo alcalde de Sao José dos Campos. La Corte Suprema decidió que los parlamentarios condenados sean despojados de sus mandatos, medida que entrará en vigencia después de que sea publicada la sentencia definitiva. La resolución provocó una controversia entre los poderes Judicial y Legislativo, que se arroga la potestad exclusiva para retirarle la banca a un legislador. (Télam-DPA)