19 Marzo 2013
EN CAMPAÑA. El presidente interino y candidato oficialista saluda a sus partidarios en un acto, en Caracas. REUTERS
CARACAS.- El presidente interino de Venezuela, Nicolás Maduro, se definió como "apóstol" del fallecido mandatario Hugo Chávez y prometió continuar "su mismo camino junto al pueblo".
"Nos declaramos apóstoles de Hugo Chávez, los apóstoles de la causa del comandante. Vamos a cuidar su legado, a nuestro pueblo; nos vamos a convertir en los protectores de los necesitados. Acá está Nicolás Maduro Moros, hijo de Chávez, apóstol de Chávez", sostuvo el mandatario interino en un acto político.
De cara a las elecciones presidenciales del 14 de abril aseguró que el oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) va a "lograr un triunfo rotundo" y dijo que "el tiempo de la traición se acabó". El mandatario sostuvo que Venezuela vive una época "de lealtades y fidelidad absoluta a los ideales de la patria".
"Que se olviden ellos (los opositores) que vamos a olvidar a Chávez. Cada vez lo tenemos más presente. Esta campaña electoral será para afirmar el camino de la patria", señaló.
El candidato oficialista pidió que cada uno presente su proyecto político para las elecciones: "El nuestro es el proyecto del pueblo contra el de la antipatria. A esta altura del juego, podemos decir que a tres semanas y media de las elecciones el pueblo tiene el triunfo en sus manos. En eso jamás le hemos mentido al pueblo, siempre hemos dicho la verdad", insistió.
A su vez, Maduro ratificó sus acusaciones a los Estados Unidos, al señalar que está detrás de planes para atentar contra el líder de la oposición, Henrique Capriles, y desestabilizar a Venezuela. "Dije algo fuerte y grave, hoy lo voy a repetir. Lo he dicho con responsabilidad. Le he dicho al presidente Barack Obama que tenemos la información directa, de primera mano, de que hay sectores que están preparando, como saben que tienen perdidas las elecciones del 14 de abril, un golpe contra la paz de la República", aseguró Maduro.
"El objetivo es enloquecer al pueblo para llevar a la violencia y a la intervención internacional", añadió y pidió "paz, conciencia y apoyo de todo el pueblo de Venezuela. Chávez perdonó a los que venían a asesinarlo, por eso se ganó un lugar en el cielo".
La ratificación de Maduro llegó después de que Estados Unidos negara de forma "categórica" las acusaciones acerca de que Washington podría estar detrás de estos planes.
"Estados Unidos rechaza categóricamente las acusaciones de cualquier participación en cualquier trama para desestabilizar o dañar a nadie en Venezuela", afirmó la vocera del Departamento de Estado de EEUU, Victoria Nuland, en una conferencia de prensa. Nuland agregó que el gobierno de Venezuela no transmitió ningún mensaje o petición formal al respecto a las autoridades de Estados Unidos.
En el programa de televisión del domingo del ex vicepresidente José Vicente Rangel, Maduro aseguró que tenía "información de muy buena fuente" según la cual "funcionarios del Pentágono y la CIA" están detrás de un plan para asesinar a Capriles con el objeto de "echarle la culpa al gobierno bolivariano y crear un caos". Implicó en su acusación a los ex embajadores de EEUU en Caracas Roger Noriega y Otto Reich. "Niego categóricamente esta acusación absurda y desafío a Maduro para que presente la pruebas que afirma tener", escribió Reich en twitter.
En tatno, ayer se conoció la primera encuesta sobre la intención de voto para los comicios: según la agencia Datanálisis, Maduro tiene una preferencia del 49,2% de los electores frente al 34,8% de Capriles. (DPA-Télam)
"Nos declaramos apóstoles de Hugo Chávez, los apóstoles de la causa del comandante. Vamos a cuidar su legado, a nuestro pueblo; nos vamos a convertir en los protectores de los necesitados. Acá está Nicolás Maduro Moros, hijo de Chávez, apóstol de Chávez", sostuvo el mandatario interino en un acto político.
De cara a las elecciones presidenciales del 14 de abril aseguró que el oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) va a "lograr un triunfo rotundo" y dijo que "el tiempo de la traición se acabó". El mandatario sostuvo que Venezuela vive una época "de lealtades y fidelidad absoluta a los ideales de la patria".
"Que se olviden ellos (los opositores) que vamos a olvidar a Chávez. Cada vez lo tenemos más presente. Esta campaña electoral será para afirmar el camino de la patria", señaló.
El candidato oficialista pidió que cada uno presente su proyecto político para las elecciones: "El nuestro es el proyecto del pueblo contra el de la antipatria. A esta altura del juego, podemos decir que a tres semanas y media de las elecciones el pueblo tiene el triunfo en sus manos. En eso jamás le hemos mentido al pueblo, siempre hemos dicho la verdad", insistió.
A su vez, Maduro ratificó sus acusaciones a los Estados Unidos, al señalar que está detrás de planes para atentar contra el líder de la oposición, Henrique Capriles, y desestabilizar a Venezuela. "Dije algo fuerte y grave, hoy lo voy a repetir. Lo he dicho con responsabilidad. Le he dicho al presidente Barack Obama que tenemos la información directa, de primera mano, de que hay sectores que están preparando, como saben que tienen perdidas las elecciones del 14 de abril, un golpe contra la paz de la República", aseguró Maduro.
"El objetivo es enloquecer al pueblo para llevar a la violencia y a la intervención internacional", añadió y pidió "paz, conciencia y apoyo de todo el pueblo de Venezuela. Chávez perdonó a los que venían a asesinarlo, por eso se ganó un lugar en el cielo".
La ratificación de Maduro llegó después de que Estados Unidos negara de forma "categórica" las acusaciones acerca de que Washington podría estar detrás de estos planes.
"Estados Unidos rechaza categóricamente las acusaciones de cualquier participación en cualquier trama para desestabilizar o dañar a nadie en Venezuela", afirmó la vocera del Departamento de Estado de EEUU, Victoria Nuland, en una conferencia de prensa. Nuland agregó que el gobierno de Venezuela no transmitió ningún mensaje o petición formal al respecto a las autoridades de Estados Unidos.
En el programa de televisión del domingo del ex vicepresidente José Vicente Rangel, Maduro aseguró que tenía "información de muy buena fuente" según la cual "funcionarios del Pentágono y la CIA" están detrás de un plan para asesinar a Capriles con el objeto de "echarle la culpa al gobierno bolivariano y crear un caos". Implicó en su acusación a los ex embajadores de EEUU en Caracas Roger Noriega y Otto Reich. "Niego categóricamente esta acusación absurda y desafío a Maduro para que presente la pruebas que afirma tener", escribió Reich en twitter.
En tatno, ayer se conoció la primera encuesta sobre la intención de voto para los comicios: según la agencia Datanálisis, Maduro tiene una preferencia del 49,2% de los electores frente al 34,8% de Capriles. (DPA-Télam)
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