25 Marzo 2013
La Caja reabrirá un casino en Concepción
El obispo Rossi manifestó su rechazo a la apertura de la sala de entretenimientos que explotará, mediante una concesión, la firma Ivisa. "Es para cubrir a los clientes de Catamarca y La Alumbrera", dijo Cortalezzi, interventor de la CPA. Los concejales no revisarán la autorización municipal
MÁS MAQUINITAS. El proyecto de abrir una sala de juegos en Concepción tiene el visto bueno de la Intendencia. LA GACETA / ARGHIVO
Las obras avanzan. Y al mismo ritmo, las versiones y los detractores. Ocurre que, como en toda ciudad del interior, en Concepción la vuelta del Casino no pasa inadvertida. Si bien desde la Caja Popular de Ahorros (CPA) afirman que la iniciativa aún está en estudio, hay autoridades de esa ciudad que reconocen que es un hecho. Según trascendidos, la obra estaría lista a mitad de año.
La firma Impresora Internacional de Valores (Ivisa) -administra el Casino de Tucumán- presentó el proyecto en el municipio de "La Perla del Sur" el año pasado. Mediante un convenio, se reabriría la sucursal que existía en esa ciudad y la CPA se encargaría de los juegos de paño. "Este proyecto es muy importante para la política de promoción turística con la que se está trabajando", había manifestado el intendente Osvaldo Morelli en diciembre, cuando se conoció la iniciativa.
"Está en análisis todavía. Para ver si se hará y cómo será. La idea está", explicó el interventor de la CPA, Armando Cortalezzi. Detalló que se tratará de un anexo de la casa central. "Estamos trabajando en las características. Será similar al Casino de aquí, moderno. Para cubrir a los clientes que vienen desde Catamarca, La Alumbrera y todo el sur. Para que no tengan que recorrer todo el camino hasta la capital", reconoció el legislador en uso de licencia. También consideró que la Caja cuenta con los empleados en planta para cubrir las necesidades de personal en esa sede. Mario Carrier, presidente del Concejo Deliberante local, afirmó que el proyecto "está avanzado" y confirmó que el convenio no pasará por el cuerpo para ser autorizado. "Estamos esperando a ver si el Concejo recibe la información oficial. En los centros urbanos importantes existen este tipo de actividades de juego; hay sectores que no acompañan porque degradan los valores familiares", afirmó. Adelantó que el cuerpo se reuniría con instituciones sociales, como la Iglesia, para escuchar sus posturas. Luego, podrían pedir informes al Ejecutivo municipal. "El tema está en la agenda del Concejo, es para analizar y debatir. Probablemente, la Municipalidad no envíe un proyecto porque hay una ordenanza de los '90 que autorizó la instalación del Casino", dijo.
El edil opositor Carlos Olarte lamentó que la iniciativa no fuera informada oficialmente a los concejales. "Pese a que tenemos iniciativa parlamentaria y sesionamos todas las semanas, el municipio sigue haciendo lo que quiere", lamentó. Como contrapartida, consideró que lo único que podrían hacer los concejales sería establecer que las casas de juego -hay una que funciona en la ciudad- también cumplan con la ley provincial que estipula el cierre a las 4. "La cuestión de los casinos es siempre controversial. Puede llegar a ser favorable al turismo, pero acarrea otras cosas tan indeseables como prostitución o prestamistas. Es un vicio el juego, que genera una degradación moral de la sociedad", opinó el concejal radical.
"No es bueno"
Con una opinión similar a la de Olarte, una de las primeras voces que se levantó en contra fue la del obispo de Concepción, monseñor José María Rossi. Apenas se gestó la iniciativa, representantes de Ivisa se reunieron con él. "Me pedían mi opinión y que compartiera el proyecto. Lo pensé y hablé con la gente de pastoral en la Conferencia Episcopal. Ahí me aseguré de que la Iglesia tiene una posición tomada en contra de los casinos. También consulté el archivo y los tres obispos anteriores se opusieron a las casas de juego. No es bueno para la gente por muchos motivos. Les respondí luego, por teléfono", relató el prelado.
Rossi explicó que la postura de la Iglesia responde a las actividades que suelen desarrollarse en torno a los casinos, a las que caracterizó como "bien oscuras".
"Me comentaron que tendrá, sobre todo, máquinas tragamonedas. Son las que atacan más el bolsillo de los pobres, es una oportunidad para los jugadores compulsivos. El juego siempre es para perder, nunca para ganar. Alienta un sueño de la plata fácil que nunca se cumple", argumentó. El obispo también afirmó que buscará mantener reuniones tanto con el intendente Morelli como con los concejales para sentar su oposición a la iniciativa.
En Concepción funcionó una sucursal del Casino provincial, pero no tenía un edificio propio. Primero, había estado en las instalaciones de la Sociedad Sirio Libanesa y luego, en un local a metros de la Municipalidad. La construcción que albergaría el nuevo casino se ubica a dos cuadras de la plaza principal, sobre la calle 24 de Septiembre al 1.200, una de las arterias comerciales de la ciudad. Cuenta con dos pisos y también incluiría servicios gastronómicos. La obra estaría lista antes de junio.
Ivisa comenzó a operar en Tucumán en 1999, con la prestación del servicio de automatización de quinielas. En 2006, la firma se hizo cargo de la explotación de tragamonedas en el Casino, a cambio de un canon. En 2012, el Gobierno cedió por medio siglo la explotación del ex hotel Savoy y los juegos electrónicos.
La firma Impresora Internacional de Valores (Ivisa) -administra el Casino de Tucumán- presentó el proyecto en el municipio de "La Perla del Sur" el año pasado. Mediante un convenio, se reabriría la sucursal que existía en esa ciudad y la CPA se encargaría de los juegos de paño. "Este proyecto es muy importante para la política de promoción turística con la que se está trabajando", había manifestado el intendente Osvaldo Morelli en diciembre, cuando se conoció la iniciativa.
"Está en análisis todavía. Para ver si se hará y cómo será. La idea está", explicó el interventor de la CPA, Armando Cortalezzi. Detalló que se tratará de un anexo de la casa central. "Estamos trabajando en las características. Será similar al Casino de aquí, moderno. Para cubrir a los clientes que vienen desde Catamarca, La Alumbrera y todo el sur. Para que no tengan que recorrer todo el camino hasta la capital", reconoció el legislador en uso de licencia. También consideró que la Caja cuenta con los empleados en planta para cubrir las necesidades de personal en esa sede. Mario Carrier, presidente del Concejo Deliberante local, afirmó que el proyecto "está avanzado" y confirmó que el convenio no pasará por el cuerpo para ser autorizado. "Estamos esperando a ver si el Concejo recibe la información oficial. En los centros urbanos importantes existen este tipo de actividades de juego; hay sectores que no acompañan porque degradan los valores familiares", afirmó. Adelantó que el cuerpo se reuniría con instituciones sociales, como la Iglesia, para escuchar sus posturas. Luego, podrían pedir informes al Ejecutivo municipal. "El tema está en la agenda del Concejo, es para analizar y debatir. Probablemente, la Municipalidad no envíe un proyecto porque hay una ordenanza de los '90 que autorizó la instalación del Casino", dijo.
El edil opositor Carlos Olarte lamentó que la iniciativa no fuera informada oficialmente a los concejales. "Pese a que tenemos iniciativa parlamentaria y sesionamos todas las semanas, el municipio sigue haciendo lo que quiere", lamentó. Como contrapartida, consideró que lo único que podrían hacer los concejales sería establecer que las casas de juego -hay una que funciona en la ciudad- también cumplan con la ley provincial que estipula el cierre a las 4. "La cuestión de los casinos es siempre controversial. Puede llegar a ser favorable al turismo, pero acarrea otras cosas tan indeseables como prostitución o prestamistas. Es un vicio el juego, que genera una degradación moral de la sociedad", opinó el concejal radical.
"No es bueno"
Con una opinión similar a la de Olarte, una de las primeras voces que se levantó en contra fue la del obispo de Concepción, monseñor José María Rossi. Apenas se gestó la iniciativa, representantes de Ivisa se reunieron con él. "Me pedían mi opinión y que compartiera el proyecto. Lo pensé y hablé con la gente de pastoral en la Conferencia Episcopal. Ahí me aseguré de que la Iglesia tiene una posición tomada en contra de los casinos. También consulté el archivo y los tres obispos anteriores se opusieron a las casas de juego. No es bueno para la gente por muchos motivos. Les respondí luego, por teléfono", relató el prelado.
Rossi explicó que la postura de la Iglesia responde a las actividades que suelen desarrollarse en torno a los casinos, a las que caracterizó como "bien oscuras".
"Me comentaron que tendrá, sobre todo, máquinas tragamonedas. Son las que atacan más el bolsillo de los pobres, es una oportunidad para los jugadores compulsivos. El juego siempre es para perder, nunca para ganar. Alienta un sueño de la plata fácil que nunca se cumple", argumentó. El obispo también afirmó que buscará mantener reuniones tanto con el intendente Morelli como con los concejales para sentar su oposición a la iniciativa.
En Concepción funcionó una sucursal del Casino provincial, pero no tenía un edificio propio. Primero, había estado en las instalaciones de la Sociedad Sirio Libanesa y luego, en un local a metros de la Municipalidad. La construcción que albergaría el nuevo casino se ubica a dos cuadras de la plaza principal, sobre la calle 24 de Septiembre al 1.200, una de las arterias comerciales de la ciudad. Cuenta con dos pisos y también incluiría servicios gastronómicos. La obra estaría lista antes de junio.
Ivisa comenzó a operar en Tucumán en 1999, con la prestación del servicio de automatización de quinielas. En 2006, la firma se hizo cargo de la explotación de tragamonedas en el Casino, a cambio de un canon. En 2012, el Gobierno cedió por medio siglo la explotación del ex hotel Savoy y los juegos electrónicos.