08 Junio 2013
EL PEDIDO DEL DT. Messi recibió las palabras de Sabella antes de ingresar.
BUENOS AIRES.- Explotó el Monumental. ¿Cuando los equipos salieron a la cancha? Negativo: cuando Lionel Messi saltó del banco al campo para tratar de inclinar una balanza equilibrada entre Argentina y Colombia.
Faltaban su toque, su magia y sus explosiones. Mucho más luego de que Gonzalo Higuaín se hiciera expulsar infantilmente y la Selección sufriera por las malas decisiones de Sergio Agüero arriba. Ángel Di María solo, no podía. Pero "Leo", a media máquina sí. Inclinó la balanza y la cancha cuando ingresó pasados los 10' del complemento.
Es que hasta ahí, sin el mejor del mundo en el rectángulo, Argentina no pudo aprovechar las llamativas fallas de la figura "cafetera". Radamel Falcao no jugó su mejor partido y falló en las pocas que tuvo. Eso fue tranquilizador para toda la defensa "albiceleste". Pero seguía faltando punch y más en el ataque. Mucho tuvo que ver David Ospina en toda la situación, en el 0 a 0 que no se movió ni con "La Pulga" manejando los hilos. Fue gigante el 1 de la visita, que se quedó con el grito sagrado en más de una ocasión.
Que Messi hizo mucho fue evidente, pero claro, no fue suficiente y ahí el eje de análisis de un equipo que sin su líder y sin su goleador, no pudo quebrar a un rival correctísimo, sin fisuras. Por eso Argentina no debe descuidarse, ni confiarse. Tampoco podrá depender siempre de "Lio", y la tarde-noche de ayer fue un ejemplo.
Tendrá tiempo Alejandro Sabella para replantearse lo vivido, para aprender de una experiencia atípica que fue ingresar a jugar sin el astro. El material está y sólo tendrá que explotarlo al máximo, ante cualquier adversidad. (Especial)
Faltaban su toque, su magia y sus explosiones. Mucho más luego de que Gonzalo Higuaín se hiciera expulsar infantilmente y la Selección sufriera por las malas decisiones de Sergio Agüero arriba. Ángel Di María solo, no podía. Pero "Leo", a media máquina sí. Inclinó la balanza y la cancha cuando ingresó pasados los 10' del complemento.
Es que hasta ahí, sin el mejor del mundo en el rectángulo, Argentina no pudo aprovechar las llamativas fallas de la figura "cafetera". Radamel Falcao no jugó su mejor partido y falló en las pocas que tuvo. Eso fue tranquilizador para toda la defensa "albiceleste". Pero seguía faltando punch y más en el ataque. Mucho tuvo que ver David Ospina en toda la situación, en el 0 a 0 que no se movió ni con "La Pulga" manejando los hilos. Fue gigante el 1 de la visita, que se quedó con el grito sagrado en más de una ocasión.
Que Messi hizo mucho fue evidente, pero claro, no fue suficiente y ahí el eje de análisis de un equipo que sin su líder y sin su goleador, no pudo quebrar a un rival correctísimo, sin fisuras. Por eso Argentina no debe descuidarse, ni confiarse. Tampoco podrá depender siempre de "Lio", y la tarde-noche de ayer fue un ejemplo.
Tendrá tiempo Alejandro Sabella para replantearse lo vivido, para aprender de una experiencia atípica que fue ingresar a jugar sin el astro. El material está y sólo tendrá que explotarlo al máximo, ante cualquier adversidad. (Especial)