14 Junio 2013
Hacía parar a los automovilistas, se presentaba como policía, solicitaba la documentación del vehículo y, apenas notaba que algo no estaba en regla, proponía un "arreglo" económico con la excusa de evitar el cobro de una multa o el secuestro del rodado. Después de recibir el dinero, les permitía a las víctimas continuar la marcha.
El accionar de este individuo había llegado a oídos de los uniformados de la seccional 3ª, quienes hasta el momento no habían tenido la oportunidad de sorprenderlo en pleno acto. Pero un vecino que fue testigo de la maniobra llamó a la comisaría, ayer a la madrugada.
Tres policías, bajo las órdenes del comisario Miguel Jiménez, fueron a la esquina de Lavalle y avenida Adolfo de la Vega, donde se encontraba el individuo. Eran las 2.45 cuando hallaron al hombre, que se movilizaba en una moto negra y vestía prendas oscuras, simulando pertenecer a la fuerza.
Cuando vio llegar a los uniformados, el hombre de 32 años intentó darse a la fuga. Pero no consiguió huir, ya que lo alcanzaron a pocos metros. Además de aprehenderlo, los policías le secuestraron una réplica de una pistola calibre 9mm metálica -exacta a la que utilizan los policías- con su respectivo cargador y balas de salva. También le encontraron una chapa identificatoria de la Policía de Tucumán y un símbolo que lo presentaba como sargento, entre otros documentos personales.
El accionar de este individuo había llegado a oídos de los uniformados de la seccional 3ª, quienes hasta el momento no habían tenido la oportunidad de sorprenderlo en pleno acto. Pero un vecino que fue testigo de la maniobra llamó a la comisaría, ayer a la madrugada.
Tres policías, bajo las órdenes del comisario Miguel Jiménez, fueron a la esquina de Lavalle y avenida Adolfo de la Vega, donde se encontraba el individuo. Eran las 2.45 cuando hallaron al hombre, que se movilizaba en una moto negra y vestía prendas oscuras, simulando pertenecer a la fuerza.
Cuando vio llegar a los uniformados, el hombre de 32 años intentó darse a la fuga. Pero no consiguió huir, ya que lo alcanzaron a pocos metros. Además de aprehenderlo, los policías le secuestraron una réplica de una pistola calibre 9mm metálica -exacta a la que utilizan los policías- con su respectivo cargador y balas de salva. También le encontraron una chapa identificatoria de la Policía de Tucumán y un símbolo que lo presentaba como sargento, entre otros documentos personales.
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