22 Julio 2013
La Policía no había identificado, hasta anoche, a ningún sospechoso del violento robo que sufrieron 25 adolescentes en una casa de Tafí del Valle, el sábado a la madrugada.
El jefe de la Unidad Regional Oeste, comisario Guido Salas, informó que el personal de la Brigada de Investigaciones se encontraba ayer trabajando en el hecho, pero no tenían rastros de los tres delincuentes que actuaron a mano armada.
El atraco ocurrió en la casa que tiene el empresario Ernesto Paz en la zona de La Banda. Cuando ingresaron los ladrones, estaban en la vivienda la hija del dueño de casa junto a 24 compañeras de colegio. Las adolescentes, todas de 14 años, habían viajado desde Yerba Buena para festejar el Día del Amigo.
Pero los delincuentes las obligaron a ingresar a una habitación, donde las mantuvieron encerradas durante cuatro horas y media. En ese lapso, las despojaron de sus billeteras, teléfonos celulares, tablets, cámaras de fotos, anillos y cadenas de oro.
Cuando se fueron los asaltantes, a las 4.30 del sábado, una de las víctimas se animó a sacar el celular que había escondido en un zapato y pidió ayuda.
Tras enterarse de lo ocurrido, Paz se mostró molesto y preocupado. "Esto me da temor, que entren a la casa habiendo gente es peligroso, lo que está sucediendo es una cosa inédita en Tafí del Valle", expresó.
El jefe de la Unidad Regional Oeste, comisario Guido Salas, informó que el personal de la Brigada de Investigaciones se encontraba ayer trabajando en el hecho, pero no tenían rastros de los tres delincuentes que actuaron a mano armada.
El atraco ocurrió en la casa que tiene el empresario Ernesto Paz en la zona de La Banda. Cuando ingresaron los ladrones, estaban en la vivienda la hija del dueño de casa junto a 24 compañeras de colegio. Las adolescentes, todas de 14 años, habían viajado desde Yerba Buena para festejar el Día del Amigo.
Pero los delincuentes las obligaron a ingresar a una habitación, donde las mantuvieron encerradas durante cuatro horas y media. En ese lapso, las despojaron de sus billeteras, teléfonos celulares, tablets, cámaras de fotos, anillos y cadenas de oro.
Cuando se fueron los asaltantes, a las 4.30 del sábado, una de las víctimas se animó a sacar el celular que había escondido en un zapato y pidió ayuda.
Tras enterarse de lo ocurrido, Paz se mostró molesto y preocupado. "Esto me da temor, que entren a la casa habiendo gente es peligroso, lo que está sucediendo es una cosa inédita en Tafí del Valle", expresó.
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