13 Septiembre 2013
MAESTRO. Cada vez que viene, Pedro Aznar convoca, emociona y cautiva con su potencia musical. LA GACETA / FOTO DE HECTOR PERALTA
Pedro Aznar ya es un habitué del teatro San Martín. Esta vez, como parte del 53° Septiembre Musical, trae el show que presentó en Buenos Aires en junio: "Mil noches y un instante".
Solo, con su notable voz y rodeado de distintos instrumentos (guitarras, bajo, teclados) Aznar brinda un recorrido -vasto y sensible- por un cancionero diverso que va de Daniel Toro a Los Beatles, pasando por Luis Alberto Spinetta y composiciones propias. Es, de algún modo, un mapa musical de influencias y pertenencias.
"Las de esta noche son para mí canciones que conllevan todas recuerdos muy queridos y que tienen que ver con esas músicas que me enseñaron a ser músico", confesó Aznar en el Gran Rex. "Lo de las mil y una noches tiene que ver con esto de pasar la vida sobre los escenarios", definió.
De adolescente, Aznar fue revelación del descomunal Madre Atómica, integró la vanguardia progresiva que fusionó rock, tango y jazz de Alas, fue parte de Serú Giran, tocó tres años en el Pat Metheny Group, y enhebró luego una carrera solista en la que se destacó como compositor e intérprete. El show abre con "Claroscuro", tema propio grabado en el disco "Quebrado", para continuar con dos bellas canciones de Spinetta. A "Qué ves en el cielo" sigue una indestructible versión de "Cantata de puentes amarillos", con fotos de Antonine Artaud y cuadros de Vincent van Gogh sobre una pantalla que, detrás del él, emite imágenes a lo largo del todo el show como única escenografía.
Aznar se desplaza con comodidad entre la guitarra eléctrica, la acústica, el bajo y los teclados. Promete un rabioso set Beatle con "Blackbird", "Strawberry fields for ever", "Michelle", "Yo soy la morsa", "Lady Madonna" y "Because".
Tal vez tenga tiempo para "Media Verónica" (Calamaro), "Lisa" (Ceratti), "Quebrado" o "While my guitar gently weeps".
ESTA NOCHE
• A partir de las 22, en el teatro San Martín (avenida Sarmiento y Muñecas).
Solo, con su notable voz y rodeado de distintos instrumentos (guitarras, bajo, teclados) Aznar brinda un recorrido -vasto y sensible- por un cancionero diverso que va de Daniel Toro a Los Beatles, pasando por Luis Alberto Spinetta y composiciones propias. Es, de algún modo, un mapa musical de influencias y pertenencias.
"Las de esta noche son para mí canciones que conllevan todas recuerdos muy queridos y que tienen que ver con esas músicas que me enseñaron a ser músico", confesó Aznar en el Gran Rex. "Lo de las mil y una noches tiene que ver con esto de pasar la vida sobre los escenarios", definió.
De adolescente, Aznar fue revelación del descomunal Madre Atómica, integró la vanguardia progresiva que fusionó rock, tango y jazz de Alas, fue parte de Serú Giran, tocó tres años en el Pat Metheny Group, y enhebró luego una carrera solista en la que se destacó como compositor e intérprete. El show abre con "Claroscuro", tema propio grabado en el disco "Quebrado", para continuar con dos bellas canciones de Spinetta. A "Qué ves en el cielo" sigue una indestructible versión de "Cantata de puentes amarillos", con fotos de Antonine Artaud y cuadros de Vincent van Gogh sobre una pantalla que, detrás del él, emite imágenes a lo largo del todo el show como única escenografía.
Aznar se desplaza con comodidad entre la guitarra eléctrica, la acústica, el bajo y los teclados. Promete un rabioso set Beatle con "Blackbird", "Strawberry fields for ever", "Michelle", "Yo soy la morsa", "Lady Madonna" y "Because".
Tal vez tenga tiempo para "Media Verónica" (Calamaro), "Lisa" (Ceratti), "Quebrado" o "While my guitar gently weeps".
ESTA NOCHE
• A partir de las 22, en el teatro San Martín (avenida Sarmiento y Muñecas).
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