17 Noviembre 2013
DELIRIO. Jorge Ponce y Alberto Avila festejan la clasificación de Bella Vista.
Aunque no lo crean, antes de los lamentables incidentes que se registraron ayer en Central Norte, hubo un partido semifinal, donde Bella Vista se clasificó para jugar la finalisima. El "gaucho" derrotó en definición desde el punto de penal a San Juan por 4 a 2. Al terminó de los 90 minutos, habían igualado 1 -1. A los 8' Leandro Herrera había puesto en ventaja a los "gauchos", pero no se habían acallado los festejos de la parcialidad de Bella Vista cuando Patricio Krupoviesa, con impecable golpe de cabeza puso lo que sería la paridad definitiva.
La clasificación para el partido decisivo de los dirigidos por Rodolfo Díaz es un premio a un equipo que con mucha vergüenza deportiva y con un inquebrantable tesón sacó un triunfo de la galera. Esto lo consiguió ante un conjunto que individualmente es superior, pero equivocó los caminos que lo conducían al marco de Alejandro Apud.
Los primeros 30 minutos de la contienda observó a San Juan como más armónico en su juego, ante un adversario que le costaba encontrar su lugar en el campo de juego. Este dominio "santo" se fue esfumando en la medida que Pedro Gerez fue sintiendo el esfuerzo del encuentro. En los tramos finales del cotejo salió a la palestra la enjundia de los muchachos de Bella Vista para estirar la definición a los penales. Allí, las manos de Apud y el pie derecho de Gastón Olmos le dieron el pasaje a la final.
La clasificación para el partido decisivo de los dirigidos por Rodolfo Díaz es un premio a un equipo que con mucha vergüenza deportiva y con un inquebrantable tesón sacó un triunfo de la galera. Esto lo consiguió ante un conjunto que individualmente es superior, pero equivocó los caminos que lo conducían al marco de Alejandro Apud.
Los primeros 30 minutos de la contienda observó a San Juan como más armónico en su juego, ante un adversario que le costaba encontrar su lugar en el campo de juego. Este dominio "santo" se fue esfumando en la medida que Pedro Gerez fue sintiendo el esfuerzo del encuentro. En los tramos finales del cotejo salió a la palestra la enjundia de los muchachos de Bella Vista para estirar la definición a los penales. Allí, las manos de Apud y el pie derecho de Gastón Olmos le dieron el pasaje a la final.
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