21 Noviembre 2013
EN SU SALSA. Carolina Saldaño, rodeada de alumnas de la escuela de patín de Barrio Jardín. La rosarina no sólo tiene un rico pasado en la especialidad, sino que transmite con estilo sus conocimientos.
La sonrisa no se le borra. Con gentileza ordenó y enseñó en el club Barrio Jardín. No parece que Carolina Saldaño la haya pasado tan mal en la vida como su historia lo demuestra. Ella es patinadora artística; su cuerpo parece que flota sobre las cuatro pequeñas ruedas de la bota del patín. Su mentón siempre apunta hacia el horizonte, sin fin en este caso porque es una soñadora. De esas que cree en los milagros porque no tenía dudas de que cuando sufrió un accidente en moto iba a volver a patinar.
Por cierto, era milagroso su pensamiento porque el accidente causó una fractura de tibia y peroné con infección. Los médicos y su familia no pensaban si volvería a patinar: el anhelo primordial era salvarle la pierna. Era suficiente para ellos que volviera a caminar, por lo menos.
"No me tomo como un ejemplo de vida", dijo la técnica nacional de la Selección Argentina a LG Deportiva. El patín es el ejemplo que la llevó a seguir con vida. "Para mí es lo que me dio fuerzas para salir de todo lo que me pasó", reconoció la actual entrenadora de Argentinos Juniors.
No hay dudas: es lo que la motivó. Pero las particularidades no estuvieron ausentes. El accidente lo tuvo a los 22, pero a los 19 ya sabía lo que era el abatimiento emocional. "Me desgarré en el Mundial de Alemania", contó Saldaño. La lesión la dejó fuera de competencia y por mucho tiempo.
Increíblemente, el regreso al patinaje fue en las horas previas al accidente que casi le cuesta una pierna. "Fui del éxtasis, de la alegría, de ponerme los patines para un show… Y unas horas después pasó lo que pasó. Tuve muchas operaciones, me hicieron injertos de huesos y de piel", recuerda la patinadora. En el medio hubo un viaje hasta Italia en búsqueda de soluciones porque la infección complicaba todo. "Fue cuando apareció Ilba. Si no fuera por ella no estaría caminando", explicó. Ella es una jueza de patinaje italiana que le pasó el dato de un hospital en Bologna donde efectivamente la ayudaron, o más bien, hicieron que suceda lo que solo Carolina pensaba. "Era como la última oportunidad. En el hospital decían que corría riesgo de que me amputaran la pierna derecha, pero salió todo bien; fue un milagro", catalogó Saldaño.
Al retornar de Italia, al poco tiempo su historia fue abordaba por el programa "Sorpresa y Media", en Canal 13. Allí le hicieron un video sobre su ejemplo de vida. Al final se vio cómo ella volvía a ponerse los patines, mientras en la trastienda sus alumnas la esperaban para darle una recepción inolvidable.
La profesora, que hasta tiene su propia marca de patines (Caro Sport) tiene especial devoción por su hija, Milagros: "quiero que sea feliz, no igual a mí", aclara quien desde hace 23 años que está junto a Mauro, su esposo.
Saldaño llegó hace algunas semanas por segunda vez a Tucumán. No dudó al recibir la invitación de su amigo y técnico del club Barrio Jardín, Miguel Grima. "Tengo mucho cariño hacia Miguel y su club. Traté de volcar todo mi conocimiento para incentivar a las nenas. Encontré una institución con muchas ganas y fuerzas, tal como es Miguel", elogió la multicampeona Nacional, Sudamericana, Odesur y representante mundialista.
La rosarina fue convocada por Marcelo Tinelli cuando el formato de su programa proponía cumplir sueños mediante la competencia de famosos en patín artístico. "A mí me gusta mucho el deporte. Eso tenía una parte de patín, una parte de espectáculo y de actuación a lo que uno no está acostumbrado. El chico no miente, el chico juega y se divierte. En la tele, no sabés que es verdad y que es mediático", explicó Saldaño.
Por cierto, era milagroso su pensamiento porque el accidente causó una fractura de tibia y peroné con infección. Los médicos y su familia no pensaban si volvería a patinar: el anhelo primordial era salvarle la pierna. Era suficiente para ellos que volviera a caminar, por lo menos.
"No me tomo como un ejemplo de vida", dijo la técnica nacional de la Selección Argentina a LG Deportiva. El patín es el ejemplo que la llevó a seguir con vida. "Para mí es lo que me dio fuerzas para salir de todo lo que me pasó", reconoció la actual entrenadora de Argentinos Juniors.
No hay dudas: es lo que la motivó. Pero las particularidades no estuvieron ausentes. El accidente lo tuvo a los 22, pero a los 19 ya sabía lo que era el abatimiento emocional. "Me desgarré en el Mundial de Alemania", contó Saldaño. La lesión la dejó fuera de competencia y por mucho tiempo.
Increíblemente, el regreso al patinaje fue en las horas previas al accidente que casi le cuesta una pierna. "Fui del éxtasis, de la alegría, de ponerme los patines para un show… Y unas horas después pasó lo que pasó. Tuve muchas operaciones, me hicieron injertos de huesos y de piel", recuerda la patinadora. En el medio hubo un viaje hasta Italia en búsqueda de soluciones porque la infección complicaba todo. "Fue cuando apareció Ilba. Si no fuera por ella no estaría caminando", explicó. Ella es una jueza de patinaje italiana que le pasó el dato de un hospital en Bologna donde efectivamente la ayudaron, o más bien, hicieron que suceda lo que solo Carolina pensaba. "Era como la última oportunidad. En el hospital decían que corría riesgo de que me amputaran la pierna derecha, pero salió todo bien; fue un milagro", catalogó Saldaño.
Al retornar de Italia, al poco tiempo su historia fue abordaba por el programa "Sorpresa y Media", en Canal 13. Allí le hicieron un video sobre su ejemplo de vida. Al final se vio cómo ella volvía a ponerse los patines, mientras en la trastienda sus alumnas la esperaban para darle una recepción inolvidable.
La profesora, que hasta tiene su propia marca de patines (Caro Sport) tiene especial devoción por su hija, Milagros: "quiero que sea feliz, no igual a mí", aclara quien desde hace 23 años que está junto a Mauro, su esposo.
Saldaño llegó hace algunas semanas por segunda vez a Tucumán. No dudó al recibir la invitación de su amigo y técnico del club Barrio Jardín, Miguel Grima. "Tengo mucho cariño hacia Miguel y su club. Traté de volcar todo mi conocimiento para incentivar a las nenas. Encontré una institución con muchas ganas y fuerzas, tal como es Miguel", elogió la multicampeona Nacional, Sudamericana, Odesur y representante mundialista.
La rosarina fue convocada por Marcelo Tinelli cuando el formato de su programa proponía cumplir sueños mediante la competencia de famosos en patín artístico. "A mí me gusta mucho el deporte. Eso tenía una parte de patín, una parte de espectáculo y de actuación a lo que uno no está acostumbrado. El chico no miente, el chico juega y se divierte. En la tele, no sabés que es verdad y que es mediático", explicó Saldaño.