25 Noviembre 2013
VISITA. Vargas Aignasse, Gassenbauer y Caponio estuvieron el martes con Alak (segundo, desde la izquierda). GENTILEZA CAROLINA VARGAS AIGNASSE
De acuerdo con lo que reflejan la mayoría de las encuestas de opinión, la inseguridad es una de las mayores preocupaciones de la sociedad y, fundamentalmente, de los habitantes del Gran San Miguel de Tucumán. Así lo entienden los dirigentes alperovichistas y amayistas, quienes proponen políticas para revertir los crecientes índices de inseguridad.
Lo curioso es que desde ambos sectores del oficialismo se impulsaron medidas con idéntico propósito, por separado, y de manera simultánea. El jueves, por caso, la Municipalidad organizó las Jornadas de Sensibilización en la Federación Económica de Tucumán y el Colegio de Abogados de la capital, en el marco del convenio que suscribió el intendente Domingo Amaya con el Registro Nacional de Armas (Renar) para la implementación del "Programa Nacional de Entrega Voluntaria de Armas de Fuego".
Así, desde mañana, en el Centro Cultural Mercedes Sosa (avenida Roca y Marina Alfaro) se permitirá a quienes lo deseen entregar armas y municiones de manera anónima y sin necesidad de presentar documento de identidad, ni credencial de legítimo usuario. A cambio recibirán un incentivo económico de entre $ 200 y $ 600, según el tipo y calibre del arma que entreguen.
En la Legislatura, por su parte, ingresó ese mismo día un proyecto de ley tendiente a fomentar un programa provincial de desarme civil, denominado "Tucumán Libre de Armas". La iniciativa lleva la firma de tres parlamentarios directamente ligados a la Casa de Gobierno: Carolina Vargas Aignasse, Guillermo Gassenbauer y Marcelo Caponio. Los legisladores, además, se reunieron por este tema con el ministro de Justicia de la Nación, Julio Alak.
"La reducción de la posesión de armas de fuego es un objetivo que debe ser abordado fuertemente por el Estado, ya que está íntimamente ligado a la protección de la vida", explicó Vargas Aignasse.
Aunque no hace mención alguna al amayismo, el proyecto de ley -en sus fundamentos- encierra una velada crítica hacia ese sector del oficialismo. "Si bien el trabajo realizado por el Renar en todos estos años ha sido excelente, creemos que es necesario fortalecer la difusión de la vigencia del programa para conocimiento efectivo de nuestros comprovincianos. Como muestra de esta falta de difusión es que vemos como se anuncian en los periódicos, como novedad, un programa que viene funcionando desde hace ya más de cinco años", sostuvieron los alperovichistas en la iniciativa.
Lo curioso es que desde ambos sectores del oficialismo se impulsaron medidas con idéntico propósito, por separado, y de manera simultánea. El jueves, por caso, la Municipalidad organizó las Jornadas de Sensibilización en la Federación Económica de Tucumán y el Colegio de Abogados de la capital, en el marco del convenio que suscribió el intendente Domingo Amaya con el Registro Nacional de Armas (Renar) para la implementación del "Programa Nacional de Entrega Voluntaria de Armas de Fuego".
Así, desde mañana, en el Centro Cultural Mercedes Sosa (avenida Roca y Marina Alfaro) se permitirá a quienes lo deseen entregar armas y municiones de manera anónima y sin necesidad de presentar documento de identidad, ni credencial de legítimo usuario. A cambio recibirán un incentivo económico de entre $ 200 y $ 600, según el tipo y calibre del arma que entreguen.
En la Legislatura, por su parte, ingresó ese mismo día un proyecto de ley tendiente a fomentar un programa provincial de desarme civil, denominado "Tucumán Libre de Armas". La iniciativa lleva la firma de tres parlamentarios directamente ligados a la Casa de Gobierno: Carolina Vargas Aignasse, Guillermo Gassenbauer y Marcelo Caponio. Los legisladores, además, se reunieron por este tema con el ministro de Justicia de la Nación, Julio Alak.
"La reducción de la posesión de armas de fuego es un objetivo que debe ser abordado fuertemente por el Estado, ya que está íntimamente ligado a la protección de la vida", explicó Vargas Aignasse.
Aunque no hace mención alguna al amayismo, el proyecto de ley -en sus fundamentos- encierra una velada crítica hacia ese sector del oficialismo. "Si bien el trabajo realizado por el Renar en todos estos años ha sido excelente, creemos que es necesario fortalecer la difusión de la vigencia del programa para conocimiento efectivo de nuestros comprovincianos. Como muestra de esta falta de difusión es que vemos como se anuncian en los periódicos, como novedad, un programa que viene funcionando desde hace ya más de cinco años", sostuvieron los alperovichistas en la iniciativa.