12 Diciembre 2013
BUENOS AIRES.- Un joven mató a cuchilladas a un remisero que se negó a llevarlo gratis desde la ciudad bonaerense de Chascomús hasta La Plata, informaron fuentes policiales. El hecho se inició en la madrugada del martes cuando el remisero Daniel Kette, de 53 años, levantó a un pasajero que le pidió que lo acercara a la ruta 2.
Al llegar al cruce de Juan Manuel de Rosas y Estanislao del Campo del barrio San Cayetano, cerca de la ruta, el pasajero le pidió que lo llevara hasta La Plata y le aclaró que no tenía dinero.
Cuando el remisero se negó a llevarlo fue golpeado y luego forcejearon, hasta que se abrió la guantera del auto y quedó a la vista un cuchillo. El joven tomó el arma y mató al remisero de varias puñaladas, y, luego de dejar el cuerpo tirado a un costado de la ruta, siguió camino a La Plata en el Renault 9 de la víctima.
Al llegar al kilómetro 64, a la altura de la localidad platense de Etcheverry, el auto se quedó sin combustible, por lo que el homicida lo abandonó entre unos pastizales.
El joven siguió camino a La Plata, con sus ropas ensangrentadas, y minutos después fue detenido en la avenida 520, entre 214 y 215, de la localidad de Abasto. El remisero era casado y padre de cinco hijos, dos de ellos de corta edad. (DyN)
Al llegar al cruce de Juan Manuel de Rosas y Estanislao del Campo del barrio San Cayetano, cerca de la ruta, el pasajero le pidió que lo llevara hasta La Plata y le aclaró que no tenía dinero.
Cuando el remisero se negó a llevarlo fue golpeado y luego forcejearon, hasta que se abrió la guantera del auto y quedó a la vista un cuchillo. El joven tomó el arma y mató al remisero de varias puñaladas, y, luego de dejar el cuerpo tirado a un costado de la ruta, siguió camino a La Plata en el Renault 9 de la víctima.
Al llegar al kilómetro 64, a la altura de la localidad platense de Etcheverry, el auto se quedó sin combustible, por lo que el homicida lo abandonó entre unos pastizales.
El joven siguió camino a La Plata, con sus ropas ensangrentadas, y minutos después fue detenido en la avenida 520, entre 214 y 215, de la localidad de Abasto. El remisero era casado y padre de cinco hijos, dos de ellos de corta edad. (DyN)